Nunca entres como root en una sesión, nunca.
Entra como usuario normal, y en una consola, o mediante kdesu, escribe:
su
Y la password. Cuando ya no necesites permisos, sal de esa sesión con Ctrl+D o logout.
Siendo root te puedes cargar absolutamente todo, y si ejecutas programas no esenciales como root, si estos tienen un fallo, pueden hacer cualquier cosa.