Por fin despierto, que oscuro está todo... me siento en mi cama a recordar...
Una mujer, era... era... perfecta. Alta, pero no mucho, guapa, como ninguna otra... tenía mucho dinero, no?. Si, recuerdo una casa muy lujosa. Las copas de cristal bailaban con la luz que entraba por la ventana. Era el salón; me encaminé al dormitorio donde ella se arreglaba...
Pues si que era guapa. La cama era muy grande, con sábanas de seda y bonitos cortinajes. Apoyado en la pared, más allá del alféizar pude ver un basto terreno, con verdes jardines y varios coches aparcados a la puerta. Esos coches eran caros sin duda, pero... eran mios?. Aquella preciosa mujer, enfundada en un vestido de noche se adornaba con muchas joyas frente al espejo... Era una actriz, si, y, y, salía conmigo. Claro ya recuerdo, los dos juntos al atardecer yo en mi smoking negro... La casa ni el coche eran míos, pero ella estaba conmigo, ¿por mi dinero?, si, eso recuerdo del último beso. Un sentimiento sin alma de pura codicia rozando mis labios...
Llegamos a un sitio, con mucha gente, todos aclaman su nombre, pero es a mi a quien respetan. Estamos en una noche de estreno, y mientras mi ¿novia?, es aclamada y entrevistada, tipos muy serios y adustos me preguntan sobre inversiones y finanzas... Era rico, era poderoso, y salía con una de las mujéres más bellas de la tierra.... buff. menos mal que desperté, MENUDA PESADILLA.
Tu sigues durmiendo; mira que te gusta!. Pusimos la otra manta, para que no pasases frío, y ahi tas, cruzada y estirada ocupando 3/4 de la cama, pero tan bonita, que no dormiría si eso te despertase. Estamos en mi casiña de alquiler, más concretamente, en mi habitación, mi palacio... en el salón están los vasitos de leche q mañana no brillarán, porque se nos ha estropeado la persiana, y el sol no entrará. Tu vestido de noche es el pijama de ositos que te regalé por navidad; te queda grande, pero abriga mucho. Los lujos más grandes que tenemos son: las fotos que tenemos colgadas juntos, y el dia de mañana, en el que no trabajamos, y que pasaremos en casa, acurrucados porque el mes aprieta y no podemos ir al cine.
Te despiertas y gruñes, me das un besito y te vuelves a acurrucar. Mañana me dirás que no te acuerdas de haber hecho eso. Esta es mi vida, la que a veces me hace llorar. La que me levanta una sonrisa cuando en noches como hoy, recuerdo que no soy rico, ni poderoso, ni salgo con la mujer más guapa del mundo, pero tengo motivos de sobra para ser feliz, y me alegro de haberlos encontrado entre estas mantas...
Buenas noches a todos/as, yo me voy a dormir, a ver si con suerte, sueño con la realidad....