Este gran divulgador de la Ciencia que es PUNSET dijo hace poco en una entrevista que la educación en España daba poca importancia a las emociones. Este me parece que es un punto fundamental para comprender la negatividad. Menos mal que ahora está cambiando esta forma de pensar.
¿No habéis sentido, alguna vez, que vuestra persona le importa poco menos que nada, o en el mejor de los casos, le supone indiferencia absoluta, a un profesor/a en el colegio, o en el instituto, o en la Universidad?. Si apruebas, le da igual. Si suspendes, le importa menos aún. Él no fracasó, fuiste tú. El fracaso es culpa del estudiante: el profesor y los padres no tienen nada que ver, por supuesto. Esta es la forma de pensar, negativa por naturaleza, de mucha gente. ¿La reconocéis?.
Cuando tienes una enseñanza sin emociones, en la que se prima es el resultado por encima de todo lo demás, obtienes negatividad. Te piden que produzcas una redacción y no les importa nada más que el resultado. Te piden que estudies de memoria un temario y no les importa que hayas aprendido algo realmente. La alegría, el entusiasmo por hacer algo, no importan. Sólo importa dar exactamente lo que se pide. El que lo hace sale adelante y el que no, fracasa (fracasa él: el sistema naturalmente no).
Al trabajar de esta forma, la motivación personal por estudiar, por triunfar o por conseguir cualquier sueño, se ve sistemáticamente machacada por las personas a las que no les interesa lo más mínimo que pienses por ti mismo, o que tengas aspiraciones en la vida.
Pues de la misma forma, unos padres que sólo machacan a sus hijos con advertencias y castigos, pero no les premian e incentivan, y tampoco se preocupan de sus deseos y aspiraciones, realmente están sembrando esa negatividad.
Algunos lugares comunes:
- "¿Estudiar una carrera? ¿Para qué?. Si vas al paro directamente". Conclusión lógica del hijo: en la vida no vale la pena esforzarse. Mejor no perder el tiempo.
- "Yo no estudié y mira lo bien que me fue en la vida". Conclusión lógica del hijo: el que estudia es tonto, o lo hace por capricho. No estudiaré porque lo que importa es ser listo como mi padre.
Etc.
Negatividad: aceptar creencias muchas veces falsas, metidas con calzador, por el sistema educativo, los padres, etc.
Moraleja: Si tienes un sueño y deseas hacer algo en la vida, no le permitas a nadie que te diga que tu sueño es imposible, y lucha por conseguirlo