Viendo como andan nuestros vecinos europeos, principalmente Portugal y Francia, esto sólo se puede explicar por el proteccionismo y ventajismo de la que ha gozado Telefónica por parte de la administración pública, y no sólo durante su etapa de empresa pública, sino también después de su privatización por parte del PP, proceso que tuvo y tiene principal importancia en la situación de las telecos en España, y es lo que ocurre cuando se realizan las privatizaciones buscando beneficiar a los amigos de turno y haciéndolas pensando con el culo de cara al consumidor. Ahora esto es una situación que va a costar años remediar, porque Telefónica sigue gozando de una posición de privilegio tanto en infraestructuras como en contactos dentro de la CMT, y el resto de empresas se conforman con el cacho de pastel que deje Telefónica.