¡¡¡PRIMER TOCHAZO WARNING DE 2008!!!
¿Están ganando terreno los juegos más interactivos y sencillos?. No hay que preguntárselo a la minoría de los jugadores (nosotros), sino a los departamentos de ventas de las desarrolladoras.
En lo personal, estoy muy satisfecho con la entrada de estos juegos a la escena. No quiere decir que los prefiera absolutamente sobre los juegos más "tradicionales", sino que me parece excelente la variedad que no había hasta hace un par de años. Aún me gustan los juegos con história, pero tener a la familia peleándose por su turno, o haciendo el mono todos muertos de la risa, no tiene precio. Eso claro, si no eres una persona tan egoista como para no apreciar el valor de esas cosas. Así que yo escojo cada juego para su momento, y no me hago pajas existenciales con que si tal título no merece llamarse juego y todos esos mojones mentales de neoeruditos lúdicos.
Me da risa como cualquiera que haya jugado cuanto RPG ó FPS exista se crea un experto en la materia y menosprecie algo que ya es todo un género en la industria. Para entender el mundo de los videojuegos en un contexto más grande que tu propia y solitaria habitación, hay que estar consciente de la forma como irrumpieron en la sociedad, y las causas y consecuencias del proceso por el cual primero atrayeron a la mayoría de la gente y luego la espantaron paulatinamente.
Con esto de los juegos me pasa como con la música. Siempre he pensado que las únicas personas con verdadero mal gusto musical son las que limitan sus preferencias a uno, o a lo sumo dos géneros, y nada más. Por supuesto que siempre hay algún género concreto que no te va a atraer, pero hay que aceptar que en todos hay buenas y malas piezas. Es una lástima que quien se crea conocedor del área, menosprecie tan fácilmente algo, sólo porque no es lo que está acostumbrado a oir (¿o jugar?).
Pero yo, y muchos más que no tienen interés de exponer esto en un foro, seguiremos disfrutando de los juegos de siempre y de este boom chorra que para mi es un bálsamo para un mundillo que estaba condenando la consola de videojuegos a una habitación desordenada y maloliente para siempre. A cambio, esta nueva era la ha sacado, así sea por los fines de semana, a la sala principal de la casa.