Tengo entendido que los sabores que intentan parecerse a la marihuana y derivados no están bien conseguidos. De hecho cuesta encontrar aromas de cosas normales que de verdad se parezcan a lo que dicen las etiquetas, aunque eso no quiere decir que no se puedan vapear y estar buenos.
Por otra parte ponerse a vapear para centrarse en eso es como ponerse a vapear para recordar el sabor a cenicero del tabaco, es decir, algo que a un fumador puede parecerle buena idea al principio pero que con la amplia gama de sabores disponibles acaba dándose cuenta de que es absurdo limitarse de esa manera y que en realidad era la dependencia lo que le hacía adorar ese sabor a calcetín quemado.