En ese artículo oí
que para la agregación
han de ser, por condición,
limítrofes entre sí.
¡Tate!, dije para mí,
ripio diabólico es
que, al ser limítrofes, pues
por fuerza son entre sí.
Porque jamás concebí
que un hombre y una mujer
amor pudiesen hacer
ella en Lugo y él aquí:
que si ha de haber himeneo
en sus formas naturales,
deben los... corresponsales
gozar de limitrofeo.
Del mismo modo, o así
lo limítrofe, sin ripios,
obliga a los municipios
a estar juntos entre sí.
Retírese, pues, de ahí,
esa expresión redundante:
quedará más elegante
aquí y en Valladolid
(o en Valladolid y aquí).
Descanse en paz.