A favor:
-La consola tendría un precio tremendamente barato al poco tiempo, dado que todo el mundo la tendría. Es como con los reproductores de DVD, tenían un precio astronómico al principio y ahora por dos duros tienes cualquiera.
-Evidentemente, no habría problema de plataforma y se podría jugar a todo y con todo.
-Con la scene de la consola se harían cosas brutísimas, puesto que todo se centraría en ella.
-Se podría ir ampliando según avanzase la tecnología, al más puro estilo Expansion Pack de N64.
En contra:
-Es algo IMPOSIBLE. Cualquier listo sacará otra consola para hacerle la competencia, por muy pocas probabilidades de salir a flote que tenga.
-Un monopolio hace que pueda hacer con el producto lo que le salga de las narices. Como poner los juegos a 300€ o quedarnos con la misma tecnología 7, 8 o más años.
-Todo puede renegarse a la política de EA, o similar, al estilo de FIFA 2007, 2008, 2009 y la innovación donde amargan los pepinos. La competición motiva y hace que salgan joyas del videojuego, si la cosa está relajada no creo yo que motive mucho...