Es habitual que abunden los posts y mensajes denunciando las malas políticas del establecimiento Game y de las nefastas prácticas de sus dependientes. Hoy quiero relatar una historia que sucedió ayer mismo y que presencié en directo. Tomen asiento pues.
Una mujer se acercó al mostrador de Game preguntando por el último Call of Duty para Playstation 4, preguntando precio y cuanto ocupaba el mismo en la memoria de la consola. El dependiente le explicó que el juego ocupaba aproximadamente 60 GB, ante lo cual la mujer expresó su preocupación, ya que mencionó que su hijo le había dicho que ya había ocupado la casi totalidad de los 500GB del almacenamiento interno de la consola. El dependiente le expuso que podía eliminar varios juegos del almacenamiento interno para así poder instalar este juego, pero la madre contestó diciendo que su primogénito no quería borrar los juegos. Ante esa tesitura, la madre, ya fuera por desconocimiento o porque así se lo transmitió su descendiente, le preguntó al dependiente si debería comprar una consola con más almacenamiento interno para solucionar este problema. Y justo en este preciso momento sucedió lo increíble, lo apabullante, lo alucinante, lo insólito:
Le dijo que no.
Seguro que en este momento del relato muchos ya habréis cerrado la pestaña de este hilo decepcionados ante la falta de una morbosa historia donde el malvado dependiente de Game engaña a una joven e indefensa madre e intenta estafarla. Sin embargo aquellos que tengáis curiosidad por ver como acabó esta curiosa historia, les invito a que continúen leyendo el relato.
El dependiente le dijo a la madre que en absoluto era necesario comprar una consola con un mayor almacenamiento interno para así poder almacenar más juegos, le explicó que la consola es compatible con discos duros, de tal manera que comprando un disco duro de un 1TB por ejemplo tendría mucho espacio extra de almacenamiento, acabando con el problema con una pequeña inversión de dinero. La madre agradeció al dependiente que le hubiera explicado dicha alternativa y el dependiente le expuso que no tenía nada que agradecer, que él estaba ahí para informar y ayudar al cliente y que lo que no podía hacer era recomendar una compra de una consola de 300€ cuando existía una alternativa claramente más económica.
Y de esta manera y una vez la madre apuntó alguna marca de discos duros que le comentó el dependiente, la misma se marchó del establecimiento.
Esta historia me parece el perfecto ejemplo de lo que algunos foreros siempre han dicho y otros se niegan a creer: las malas experiencias vividas en Game no son atribuibles a todos los establecimientos y todos sus trabajadores. Como en todos los puestos de empleo, siempre habrá mejores y peores empleados, pero no es justo condenar a todos ellos por las malas prácticas de unos pocos.
¡Saludos!
PD: A ver cuando tarda en aparecer el típico mensaje de: "esto es mentira, no es posible, Game es el demonio y esto jamás sucedería"