Jugar a 60 fps en pc, nunca fue algo duradero y barato. Pero ahora estamos en tiempos difíciles. Graficas caras, poco stock, especuladores y nuevas consolas. El problema aquí es que las nuevas son cosas potentes. Es como cuando salieron xbox 360 y ps3. En 2005-2007, no te valía para mucho una gráfica comprada tiempo atrás, ni aunque fuera buena. Había que comprarse algo que saliera después y de cierto presupuesto, para aguantar la generación sin gastar más. Pero incluso así no fue suficiente, ya que salieron juegos únicamente en directx11. Esas tarjetas como la 8800gt y otras, no lo soportaban.
Yo estoy peor que tú, al tener una gtx 1050 ti. A mí los juegos de ubisoft ya no me llaman mucho. Son demasiado repetitivos en sus mecánicas. Pero jugar más o menos bien a toda clase de juegos, va a implicar poner más dinero y no únicamente en la gráfica. Puede que luego necesites más ram, un procesador mejor......
No hay que fiarse de lo que pida un juego como Goodfall para decir que si puede con eso, puedes con todo. Los juegos lanzados en 2013 para consolas, los movía muy bien una vieja gtx 750 ti. Incluso en wachdogs, que salió al año siguiente a buenos fps en calidad media. Pero mira lo que pasa con esa gráfica y el famos juego rompe pcs:
https://www.youtube.com/watch?v=TF2m7NljkUAEl RDR2 sigue siendo un juego de la ps4/xone y esa gráfica hay que ponerla a 720p en bajo para que al menos sea jugable. A más resolución se queda sin memoria de vídeo y y hay tirones. Pero las consolas, a pesar de ser resolución dinámica, va a tirar algo por encima que siempre a 720p. Por lo que la gráfica que era parecida a la gpu de consolas, ha envejecido peor.
La opción de vender la tuya y optar por otra más apta para durar, lo veo factible. Pero hasta cierto punto. Si vendes la tuya, tendrá demanda. Pero igual no encuentras otra cosa mejor sin pagar precio especulado. Y si te compras una y vendes después la tuya, te puede pasar que luego la tuya ya se valore menos que ahora. Creo que es mal tiempo para comprar y vender de segunda mano. Me recuerda a los tiempos de minería. Mucha gente vendía la suya porque se la pagaban bien. Pero luego tampoco tenían nada que comprar, porque todo estaba carísimo.