Siguiendo al
anuncio de Nexus 9, Nexus 6, Nexus Player y Android 5.9 Lollipop, Google ha decepcionado a los parques bursátiles con sus últimos
resultados trimestrales. El gigante de Internet ha declarado un aumento interanual en ingresos del 20,1% hasta los 16.520 millones de dólares, que no llegan a los 16.570 millones que esperaban los analistas.
En la vertiente negativa, Google ha experimentado un descenso en sus beneficios netos del 5% respecto al año pasado hasta los 2.800 millones de dólares. Los inversores han castigado estas discrepancias en las cifras con una caída del 3% en las acciones de la compañía tras el cierre de los mercados.
Uno de los datos más preocupantes ha sido la desaceleración del coste medio por clic en el servicio de publicidad de Google, que ha descendido un 2% durante el último trimestre. En contraste, el número total de clics ha aumentado un 17% respecto al año pasado, pero los analistas esperaban un incremento del 22% o más. Todo esto acompaña a una caída trimestral del 3% en los beneficios generados por las páginas de Google.
La firma de Mountain View acusa en su último ejercicio la contratación de 2.421 nuevos empleados y el aumento de los costes de infraestructuras. Según el informe de la compañía, los costes de sus centros de datos, inventario de
hardware y otros gastos relacionados con instalaciones han aumentado un 37% durante el último año hasta los 3.350 millones de dólares.
"Seguimos estando emocionados con el crecimiento de nuestro negocio de publicidad y otros negocios emergentes", comenta el jefe financiero de Google, Patrick Pichette. "La monetarización es aún muy sólida, estamos muy contentos con eso. Si hay fluctuaciones trimestrales, tiene que ver con la experimentación continuada que hacemos y la suma de otros muchos factores. No hay nada que destacar en este trimestre".