Un noticiario local de Houston informaba ayer sobre el arresto de un hombre de 41 años bajo cargos de posesión de pornografía infantil. Según revela el Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados (NCMEC), la detención ha sido posible gracias a un aviso realizado por Google tras encontrar fotografías delictivas en la cuenta de Gmail del acusado.
"Estaba intentando salirse con la suya sin que le cogieran, estaba intentando mantenerlo dentro de su email", comenta el detective David Nettles a
KHOU-TV. "Yo no puedo ver esa información, no puedo ver esa foto. Pero Google puede".
Dejando a un lado el justo final que Google ha brindado al caso, los detalles sobre el arresto han provocado dudas sobre el alcance de la monitorización en Gmail y la privacidad del servicio. Ante el revuelo suscitado durante las últimas horas, Google ha salido al paso con un comunicado sobre el asunto a la agencia
AFP aclarando sus políticas.
"Por desgracia, todas las compañías de tecnología se tienen que enfrentar al abuso sexual de menores", comenta un portavoz de Google. "Es por esto por lo que Google elimina imágenes ilegales de forma activa en nuestros servicios, incluyendo búsqueda y Gmail, e informa inmediatamente de los casos de abuso al NCMEC".
"A cada imagen de abuso sexual de menores se le asigna una huella digital que permite a nuestros sistemas identificar esas imágenes, incluyendo en Gmail. Es importante recordar que solo usamos esta tecnología para identificar imágenes de abuso sexual de menores, y no otro contenido de emails que pueda estar asociado con actividad criminal (por ejemplo utilizar un email para planear un robo)".
Esta noticia llega después de que Google actualizara el pasado abril los
términos de servicio de Gmail haciendo mención explícita a la monitorización de contenidos. La firma de Mountain View explica que su servicio de correo realiza "análisis automatizados" que ocurren "cuanto el contenido se envía, se recibe y cuando se almacena".