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Chromebook Pixel marcó un antes y un después en la concepción de lo que tenía que ser un portátil con Chrome OS hecho y derecho. Lanzado en 2013, su inusual mezcla de diseño minimalista, hardware puntero y precio nada asequible (tras factores irreconciliables con la idea general de lo que era un Chromebook) lo convirtieron en un éxito de culto inmediato entre los fans del sistema operativo de Google a pesar de sus reducidas ventas. Ahora sabemos que Google no tiene planes para lanzar nuevos portátiles Pixel.
Según ha podido saber
TechCrunch a través de Rick Osterloh, jefe de hardware de Google, la submarca Pixel se encontrará por ahora en dispositivos móviles como los
Pixel y Pixel XL (cuyas ventas parecen estar funcionando favorablemente). De acuerdo con Osterloh, las dos generaciones de los portátiles Pixel se han vendido totalmente y no hay intención de fabricar nuevas unidades o lanzar nuevos modelos. Esto, sin embargo, no quiere decir que Google vaya a dar la espalda a este segmento.
El Chromebook Pixel sorprendió en 2013 por su cuidado diseño y gran rendimiento. "Google no se ha retirado de los laptops. Tenemos la segunda cuota de mercado en Estados Unidos y el Reino Unido, pero no tenemos planes relacionados con nuevos laptops con el sello de Google", ha señalado el ejecutivo durante una entrevista concedida en el Mobile World Congress.
La estrategia actual de Google parece pasar por la promoción de Chrome OS como plataforma alternativa a Windows en entornos como el educativo al tiempo que sus ingenieros siguen introduciendo características como la
compatibilidad con aplicaciones de Android y su adaptación a las tabletas, que sin duda servirá para afianzar su posición en el mercado.
En cierto modo puede decirse que el Chromebook Pixel (y más especialmente su segunda generación, lanzada en 2015) ya cumplió su cometido: mostrar que Chrome OS era lo suficientemente atractivo y versátil como para desarrollar portátiles más refinados con características avanzadas actualmente comunes como
puertos USB-C y pantallas táctiles.
Fuente: TechCrunch