Hola, os dejo por aquí una cosilla.
Gotean las piedras imágenes
de plácidas siestas bajo sábanas
que huelen a besos
cubiertos con fresco carmín de color rosa.
Gota tras gota,
siguiendo el tañer de una campana
en solemne recuerdo a las palabras
que no fueron pronunciadas,
a los sentimientos que se apolillan
en una cómoda, como flores secas,
encerrados en diarios de amarillas páginas
que se esconden cobardes
entre el blanco de la ropa.
Con la última campanada,
blanquea la marmórea fuente el agua
recitando versos escritos a antiguos amores
por plumas que ya están rotas.
Canta a la vez la alondra
siguiéndolos con cada nota,
mientras una lágrima se escapa
calle abajo entre suspiros
y quejidos de uñas amoratadas,
que buscan ilusiones sobre las rocas,
entre lascas, preguntándose unas a otras:
-¿Por qué?
-¿Por qué duele tanto ahora?
Un saludo a todos.