Yo me he leído el primer tomo de City Hunter y me ha parecido notable, muy adictivo y un chute de nostalgia pura y dura de los 80. Machista como pocos, lo que puede tirar para atrás a más de un lector (y sobretodo lectora). Las intros a color, una delicia, las notas de color rosa de las páginas a b/n, muy elegantes, me funcionan de maravilla con el look de esta historia criminal repleta de chicas sexys y sensualidad en el fantástico dibujo de Hojo. No es una obra maestra pero es un manga encantador con muchos alicientes para merecer estar en mi colección en una edición claramente definitiva (no se le puede pedir más a la editora).
Creo que seguiré con la colección (lo decidiré a partir del tercer o cuarto tomo, si no se hace repetitiva).
Paralelamente empezaré con F. Compo, y esta última, de la que he ojeado varias páginas, sí que creo que me gustará aún más que City Hunter y me la haré entera (es más asequible en duración).
Saludos.