La verdad que vaya racha la de los cantantes que fueron etiquetados bajo la denominación de "grunge". Andrew Wood, Kurt Cobain, Lane Staley, Scott Weiland y ahora Chris Cornell... Excepto Weiland todos de Seattle, si fuese Eddie Vedder empezaría a estar acojonado.
Ya empiezan a surgir los rumores de que haya sido posiblemente un suicidio, no se sabe si meditado o accidental.
Siempre es una pena que alguien tan joven y con proyectos a corto plazo por delante nos abandone de forma tan repentina. Una grandísima voz con la que compartí muchos momentos de mi adolescencia y que seguí disfrutando hasta el día de hoy, se lleva un montón de futuros proyectos pero nos deja un buen legado. Que en paz esté allí donde vaya.
Un saludo.