Hablemos de... Battle Hunter (1999)

Battle Hunter es un juego que al principio que era un RPG táctico, pero tras jugarlo pasaban cosas muy raras en pantalla que no terminaba de entender. Primero no había un "New Game" para empezar, sino que había un "Create a new hunter" (Crear nuevo cazador) un editor muy básico y sencillo que nos permite crear nuestros avatares con un grado de personalización muy limitado, pero suficiente para diferenciar a los diversos cazadores.

Una vez creado logré acceder a un nuevo menú donde elegir nueva misión donde un personaje me dice que soy un novato y que por eso mi primera misión va a ser chupada y que le encuentre un objeto. Allé fui y... no entendí una mierda: tenía que elegir entre cartas que hacían cosas como aumentar mi movimientos, la agilidad, poner trampas, etc. Los otros personajes se movían a su bola, a veces aparecían enemigos que los atacaban, yo pisé una trampa, había cajas por ahí, total que perdí.

Por un momento pensé que era demasiado complicado para jugarlo en 2018 y debería descartarlo sin más, pero por otro lado no veía tantas opciones a elegir como para que fuese tan complejo de entender. Simplemente necesitaba leerme el manual o una explicación y ¡Magia!.

Tras narraros como ha sido mi evolución con este juego proceso a explicaros como funciona porque es muy simple, divertido y adictivo para partidas cortas e incluso si encontráis amigos que quieran gastar 10 minutos en aprender el sistema os puede dar unos buenos vicios (recomendado meter chupitos como en todos los juegos).

Battle Hunter tiene tintes de rol, pero del rol de mesa más que de consolas. Al empezar una misión se nos mandará conseguir un objeto, el cual está en una de las cajas repartidas por el mapa. Cada caja tiene siempre un objeto bueno, ya sea el que necesitamos para ganar u otros que pueden venderse o mejorar nuestros atributos.
Nuestra misión por tanto consiste en movernos por el mapa de caja en caja hasta conseguir el objeto y llegar a la salida del mapa con el mismo. Evidentemente los otros personajes vendrán a por nosotros si conseguimos el objeto y nosotros a por ellos si vemos que lo consiguen primero. Podremos ir hacía ellos y atacarles así como usar cartas para colocar trampas en el camino a la salida.

A mayores y esto no lo he entendido del todo bien, pero a ratos aparecen enemigos en el mapa cuya misión es atacar a los cazadores sin más. Y aquí podemos pasar a hablar del sistema de combate tanto para estos enemigos como contra los otros personajes, si decidimos atacar podremos elegir una carta que usar y se generarán aleatoriamente dos cartas-dados de ataque y otras dos de defensa. Se sumarán y se restarán si el ataque es mayor que la defensa le haremos daño, si es igual o menor nada.
Las opciones son mayores si nos agreden, podremos elegir entre escapar y con suerte salir ilesos (no), defendernos lo que aumenta la suma de las cartas de nuestra defensa (creo que dobla su valor) o contraatacar que implica que si sobrevivimos al primer ataque se hará una segunda tirada donde nosotros somos el atacante con las mismas normas de antes. Todo esto sucede con rapidez, nada de cinemáticas o animaciones eternas, el juego es muy fluido y visual pese a toda esta parrafada, una vez sabes de que va no tardas ni 20 segundos en hacer un combate.

Quizás me faltó añadir antes que en cada turno tenemos tres opciones: movernos, atacar o descansar (recuperar salud). Y aparte elegir que carta usar, si es que queremos usar una. Y poco más queda añadir para comprender este juego, que cada mapa se genera de forma aleatoria como ya he dicho, pero cuenta con 80 cartas que se van repartiendo en cada turno y por lo que he leído la baraja es siempre la misma así que si llevamos la cuenta de lo que ha ido saliendo podemos saber que es lo que queda en el tablero. Sobre las cartas no tienen mucha ciencia y se diferencian por el color sobre todo, nos permitirán desplazarnos unas casillas a mayores de lo que nos salga en nuestra tirada, aumentar nuestra agilidad para evadir trampas ocultas, otras permiten colocar trampas para otros jugadores, etc.

Pone la guinda final el pequeño detalle de que si se terminan las 80 cartas sin que el jugador con el objeto no haya alcanzado la salida aparece un enemigo en el mapa con unos stas altísimos y que lo perseguirá en cada turno. Todavía no he muerto nunca así que no sé bien que pasa, supongo que el objeto cae al suelo y lo puede pillar otro jugador. Cada vez que terminamos una misión nos darán una recompensa en metálico, podremos curarnos o subir de nivel, vender los otros objetos que hemos conseguido, etc. Y vuelta a empezar.


En resumen estamos ante un falso RPG que quitando sus combates como podéis leer se trata más bien de una mezcla de juego de tablero y juego de cartas; pero de forma muy sencilla y sin demasiada complejidad con las normas y posibilidades. Ya he dicho que todo va bastante rápido y se agradece, me encantan los Mario Party; pero me resulta muy cansino cuando juegas un rato tener que comerse continuamente los desplazamientos por el tablero, las animaciones de los dados, el Toad dandote el discurso, etc. Aquí no pasa nada de eso y se agradece un montón (sin ser el juego un Mario Party al uso ni nada eh).


P.D: Está muy mal narrado porque escribo las cosas según me vienen y no me paro a maquetar ni a revisar demasiado el texto. Es un poco una tormenta de ideas sin sentido de aficionado, cuando tenga una revista propia si eso lo hago más "profesional"