SEGA Rally es uno de los íconos de los 90 de la SEGA en la cima de los salones recreativos, probablemente su época más dorada junto con los primeros años del siglo actual.
Esta nueva entrega, por lo que he leído ha sido aclamado y criticado, con algo más de alabanzas que quejas, curiosamente ambos tipos de opiniones se centran en los mismo aspectos: jugabilidad y gráficos. Es curioso como un mismo juego puede tener opiniones dispares basadas en los mismos aspectos, pero son cosas que pasan. En mi opinión no tienen razón ni unos ni otros, pero los positivos debían ser segueros de pura cepa y no iban a criticar absolutamente nada de ella y menos en Dreamcast, esa gran espinita clavada, los segundos quizás fueran unos exagerados o piel final o desconocedores de lo que había en 1999 en otras consolas o también fueran segueros aferrimos, pero de la SEGA de los salones recreativos donde habían gozado y mamado el primer SEGA Rally en condiciones y nunca cataron la versión recortada (que no mala) de SEGA Saturn y esperaban tener ese mismo SEGA Rally en Dreamcast y no puedo culparles porque lo cierto es que Dreamcast se merecía recibir todos los ports arcade que Saturn recibió a medio gas o directamente ni recibió, si no como entregas sueltas si como extras.
Nota de autor ahora: No me he pasado el juego al 100% de hecho los juegos de carreras no son lo mío, lo he jugado un rato y vicié en su día al arcade de 1995. Digo esto porque a lo mejor en comentarios me decís que el arcade de 1995 está incluido como extra o algo así.
Continuamos, lo primero que destaca del juego es su amplia selección de coches y pistas para un título que suda arcade por todos sus poros. Cuenta con más de 20 vehículos diferentes, cada uno con su propio manejo y características, los jugadores pueden experimentar una variedad de experiencias de conducción. Además, las pistas están diseñadas de forma impecable, con obstáculos dinámicos, condiciones climáticas cambiantes y caminos llenos de baches que desafían a los pilotos a sacar lo mejor de sus habilidades. No está nada mal, especialmente si vienes de PS1 y N64 donde cualquier arcade te traía un par de coches y los que llegaba a ocho o más ya era el no va más y y lo mismo pasaba con los circuitos, hay excepciones evidentemente.
La jugabilidad de SEGA Rally 2 es simplemente adictiva. Los controles son suaves y receptivos, lo que permite sentir la emoción de la velocidad y sentir que realmente estás compitiendo y no chocando con todo, esto lo digo especialmente porque yo soy manco en carreras salvo juegos de muy fácil manejo, que son los únicos que llegan a engancharme, fáciles de aprender, difíciles de vencer. Como nota curiosa, al menos en mi caso, juego mucho mejor con la cruceta que con el stick. En todo caso, los derrapes míticos frenando y acelerando según las necesidades me han salido casi siempre bien a la primera y eso me produce gustirrín, ya luego alguien pro como yo seguro que hace lo mismo que yo sacandome minutos de ventaja, pero eso es lo positivo del juego, que todos podemos jugar.
Los gráficos de SEGA Rally 2 son impresionantes para su época, aquí veo una de cal y una de arena, el juego es de 1999, unos 2-3 meses después de lanzarse la consola. Teniendo en cuenta esto, habría que decir que es gráficamente la hostia (sigo insistiendo en que en PS1 teníamos GT2, Collin McRae 2 y en N64 World Driver Championship Top Gear Rally 2 (todos muy buenos, pero evidentemente por debajo). Los modelos de coches están detallados y bien diseñados, las pistas están llenas de vida y los efectos especiales, como que se manche el coche de polvo en pistas de tierra o los efectos climáticos realistas.
Ahora bien, ignorando que competía con la quinta gen y no había otra consola de sexta gen (desconozco en PC que había, yo en el 99 en el ciber solo recuerdo el Collin McRae 2 y así de memoria no diría que gráficamente fuera mejor), lo cierto es que hay cosas negativas que señalar, lo primero la distancia de dibujado, hay una niebla persistente en todas las pistas, en otros juegos de DC esto no pasa, no es sumamente molesta en algunos circuitos, pero en los de nieve por ejemplo está todavía más cercana y dificulta ver la pista. Otro aspecto es que el framerate parece bailar, no ha sido sumamente molesto, pero cuando iba solo por los tuneles de algún circuito notaba una gran fluidez (60fps?) y al saliir o aparecer un rival bajón (30fps?). Por otro lado, el público son sprites 2D sin ningún tipo de animación, queda un poco feo, especialmente si te estampas porque los ves claramente.
Todo esto debe valorarlo cada jugador en el contexto que quiera, yo para 1999 tengo claro que es un juego que supera con creces todo lo que uno podría esperarse de un sistema doméstico, no es ni por asomo aquellas adaptaciones sufridas que recibía Saturn y que, curiosamente, hoy en día la gente alaba como "es que no podías pedir más", pues todavía más motivo para tener este SEGA Rally 2 en un gran juego de lanzamiento del sistema.
