Me parece muy bien que Harrison Ford siga trabajando, y presentándose de manera espléndida en pantalla, para la edad cronológica que tiene y que lógicamente se desprende de su partida de nacimiento.
A vosotros os puede parecer trivial, pero no lo es: en el mundo del Cine, se envejece pronto y uno se puede quedar excluido y sin trabajo rápidamente. No hace falta ni llegar a los 60 años para que eso ocurra. Así que mantener el tipo y ser capaz de dar el "estándar" necesario en pantalla, a una edad provecta, no es algo para tomar a broma sino algo muy elogiable.
Por otro lado, el Sr. Harrison Ford está también demostrando que, a su edad, es perfectamente posible seguir haciendo papeles importantes en una producción de primera de Hollywood. Esto es una inyección de moral para todas las personas de su generación, porque tenéis que saber que estamos todos nosotros influidos por una epidemia de cierta discriminación cultural y social que se llama "Ageísmo" o "edadismo" y que consiste precisamente en ignorar o menospreciar el valor de las personas mayores.
El "ageísmo" se percibe por ejemplo cuando una persona joven, se refiere a un Mayor, como "el abuelito" o "la abuelita" o le habla en voz alta (como si el Mayor fuese sordo) o le habla como a un niño pequeño, como si el Mayor fuese tonto.
Pues no. Las personas mayores no son tontas, ni quieren que se les hable a gritos, ni quieren ser tratados como niños. Son personas que han vivido más, porque nacieron antes. Como sabiamente contestó Cervantes cuando le insultaron llamándole "viejo": "No está en mis manos detener el paso del tiempo".
Vosotros también seréis personas mayores, y tendréis la edad de Harrison Ford. Para entonces, veréis la gracia que os haría que alguien os mire con altivez y menosprecio por hacer ejercicio con una bicicleta, o por querer seguir trabajando.
Se habla ya de la Cuarta Edad, porque la tercera se queda corta, pues hoy en día, gracias al avance de la medicina, y a la ausencia -afortunadamente- de guerras, las personas con 70, 80 años, si se cuidan, pueden estar físicamente mucho mejor que hace 50 años.
Cuando veáis que se burlan de una persona por su edad avanzada, poneos vosotros en el lugar de esa persona mayor. ¿Es la edad un motivo válido para despreciar a alguien? ¿No cumplió acaso un papel necesario la señora anciana que salía en la película "Titanic"?
Todas las civilizaciones poderosas han valorado a sus mayores y les han honrado: así los romanos, los chinos, los japoneses.
Harrison Ford hace bien en seguir en la brecha.