Sinceramente, ellos sabrán, pero presentar un remake como baza para vender tu consola el mismo momento que tu competencia actualiza todo su catalogo gratuitamente y además te da todo su catálogo por 10€ al mes...pues puede ser tu tumba.
Sony, pese a dominar esta generación se encuentra en una posición delicada, siguen cobrando los 50-60€ por sus títulos mientras que la competencia desde su posición esta siendo mucho más agresiva con los precios y servicios.
Nintendo se desmarco de esta carrera, han apostado por su valor de marca, de que asociemos sus juegos como divertidos y para toda la familia, pero cobrando bien por ello. Sony ha conseguido tener su propia marca, con sus juegos single player, algunos más cinematográficos que otros pero que también tienen su sello. Ahora deben buscar la manera de seguir vendiéndolos pero el público dudo que tenga la intención de pagar por lo mismo cuando en la acera de enfrente lo tienen gratis.
Otro pensamiento que tengo es la fidelización del cliente que se puede dar en esta generación que entra. Todo esta virando hacia lo digital, en un futuro el cliente será mucho más reacio a cambiar de plataforma de juego pues tendrá una gran biblioteca de juegos asociada a una marca. La compañía que gestione mejor esa fidelización se llevará buena parte del pastel.
La competencia aprieta y todos ganamos.