Yo antes de fichar a Cesc confiaba en Iniesta. Me cabrea y mucho como ha manejado Rijkaard la baja de Xavi y como ha condenado a Iniesta al banquillo cuando era el sustituto ideal.
Aquí os dejo la opinión de Xavier Bosch en la contraportada de MD del miercoles:
Pidan perdón a Andrés
Decían de Iniesta que no había aprovechado la oportunidad de la baja de Xavi cuando, en realidad, no fue la primera opción de Rijkaard para sustituir al lesionado centrocampista de Terrassa. Decían que en Europa mejor que no jugara porque le faltaba espíritu defensivo. Ayer tapó muchas bocas. Decían que, si Rijkaard contaba con él, tenía que ser en la media punta y lejos del medio centro defensivo. A todos, de todo corazón, una “botifarra de pagès”. Iniesta es un jugador que, si el Barça lo buscara en el mercado, no tendría bastantes euros para ficharle. Iniesta demostró que, si jugara en el Arsenal, sería un clamor que tendría que ir al Mundial. Ayer, en Da Luz, dio un recital de fútbol con el balón en los pies, de colocación defensiva, de desmarque táctico y de metrónomo de un Barça que jugó la mejor primera parte desde el partidazo del Santiago Bernabéu.A Iniesta sólo le faltó el gol en la jugada individual, al más puro estilo Maradona, que se inventó en la primera parte. Claro que en el primer acto, nuestra delantera falló lo inexplicable: la de Eto'o, la de Deco, las dos de Van Bommel, los dos chutazos de Ronaldinho. En el área parecíamos pisadores de uvas más que futbolistas. Con tan poco tino, hicimos internacional a un portero, Moretto, que con los pies demostró ser el mejor aliado europeo que ha tenido el Barça en muchos años. En la segunda parte, en cambio, los balones a los palos nos minaron la moral. Larsson y Motta hicieron un homenaje a Czibor, Kocsis y Kubala en la noche de Berna, la más desgraciada en nuestros 106 años de vida.Para los que no son resultadistas, lo de anoche fue un partidazo. Rijkaard y Ten Cate pueden estar muy orgullosos de su equipo y de uno de los mejores porteros de Europa, ese Víctor Valdés que volvió a ser salvador. El tándem de entrenadores holandeses han conseguido hacer un fútbol como el traje oficial que estrenaban ayer: elegante, sedoso y brillante.Decía el futbolista Ian Wright que “un 0-0 en Italia es un aburrimiento, un 0-0 en Inglaterra puede ser muy interesante”. Y tendría que añadir que un empate sin goles como el de ayer en el estadio Da Luz de Lisboa fue el mejor espectáculo del mundo.