Hoy voy a detenerme en un tema curioso: cómo se están retratando un gran número de periodistas a cuento de la llegada de Mourinho. Está saliendo a la luz la increíble cantidad de mediocres y obtusos que alberga esta profesión, al parecer heridos en los más íntimo de su ser por fichaje del portugués, gente que por cierto no dijo ni mú cuando el club trajo a gente muchísimo menos capacitada para el puesto. Voy a hacer una pequeña recopilación de escritos que resulta divertida hoy, y lo será mucho más en uno o dos años. Vamos con ella:
Empezamos con Óscar García, un tipo que lleva tiempo enmierdando las páginas del As, que principios de mes nos deleitaba con esta cosa titulada "El Bernabéu no es sitio para Mourinho".
"Vivimos en un fútbol mercantilizado y deshumanizado, pero por fortuna no todo vale para llegar al objetivo. La victoria es el último fin, pero no se deben aceptar todos los caminos para lograrla. Conviene hacerlo con estilo, con gusto. Jugar bien multiplica las opciones de victoria y, para huir de absurdas divagaciones demagógicas, aclaramos que un equipo juega bien cuando consigue que el público se divierta. Y el público se divierte con los equipos que se entregan al toque, con los que explotan el contragolpe o con los que crecen en el descontrol de un partido roto. Pero no con los que exageran las precauciones defensivas hasta olvidarse del ataque si así aumentan sus opciones de ganar. En el Santiago Bernabéu nunca estuvo bien visto eso, ahí no vale ganar de cualquier manera. Por eso, el Bernabéu no es sitio para José Mourinho.
El Real Madrid exige el triunfo con la misma firmeza que muestra para despreciar a quien renuncia al espectáculo. El argumento de los resultados, del título de Liga ganado, no libró de los pitos a Fabio Capello, un técnico que ganó dos Ligas en las dos temporadas que dirigió al Madrid y al que muy pocos añoran en el Bernabéu. Su marcha fue vista por muchos como un alivio."
Claro que sí, fue todo un alivio, y además condición previa para poder disfrutar de los pedazo de entrenadores que vinieron después. En Sportyou, al tontito de Elías Israel (o uno de sus mamporreros) le faltaron los cojones suficientes para poner negro sobre blanco su opinión sobre el luso, así que aprovechó el pseudónimo "El Moscardón" para soltar esta perlita antes de la final de Madrid:
"El trato que está recibiendo el Inter por parte de Mourinho es suficiente como para que el técnico no se siente mañana a dirigir la final. Las puñaladas traperas del entrenador a su propio club no tienen parangón en la historia del fútbol. Hace falta ser desahogado para, a sólo unas horas de la final de la Champions, estar diciendo que aquella no es su casa, que se quiere ir al Madrid o incluso recibir al ‘Marca' en la ciudad deportiva del Inter para ahondar más en la herida. (Por cierto, enhorabuena a Inda y a Rojo por la exclusiva).
Sólo este comportamiento, falto de cualquier ética, pone a Mourinho bajo sospecha. Si hoy se lo hace al Inter, ¿quién dice que mañana no se va a comportar de igual forma con el Real Madrid? Que Florentino sepa que contrata a un auténtico mercenario, a un tipo sin entrañas deportivas, a un entrenador capaz de ponerse a dirigir al equipo contrario en pleno partido si con eso acapara foco, llama la atención o provoca al mundo entero."
Un mercenario, di que sí. Donde estén románticos del fútbol como Juande, o Chúsquer, un socio del Barsa entrenando al Madrid... El idiota de Jesús Alcaide (baulista cerrao) escribía hace un par de meses en El Mundo, a cuento de la eliminatoria Inter-Chelsea la columnita Mourinho ganó bien. ¿Y qué?, con frases como esta: "Que el Inter no ha jugado con el descaro y con los momentos de capacidad combinativa mostrados ayer en Londres durante los últimos 20 meses es un hecho. Que por lo ocurrido en la guarida del Chelsea, una legión de supuestos analistas van a pedir a Florentino que fiche a Mourinho es tan seguro como que dos y dos son todavía cuatro. Bien, están en su derecho. Como lo estaban en la pasaa campaña, cuando el portugués fue despedido de la Champions en los octavos de final, o hace dos, cuando el Chelsea le destituyó por una mala racha de deficientes resultados."
Jesulín, Mourinho no se fue del Chelsea por malos resultados, y o bien lo sabes y mientes o eres más corto de lo que pareces. Tras la victoria en Champions, el muchacho escribía, abatido, una nueva columna: "De momento, Mourinho puede disfrutar. Su idea le ha servido para ganar un triplete y suceder al Barcelona, su gran enemigo. Ha logrado cuatro títulos en dos años con el Inter. Los números son incontestables. En cuanto a gustos, no hay nada escrito." Primero era poco menos que un fracasado y ahora los números son incontestables, ¿no? Pues a comer polla mourinhana, Jesulín. Anda que no te queda, supuesto analista.
Esta cosita de Sámano cuando el Inter se cargó a la Barsa no tiene desperdicio. Me estoy dando cuenta de el tío ni siquiera sabe escribir:
"Nadie recordará a este Inter de Mourinho, salvo porque renunció a un fabuloso espectáculo en favor de una gran Copa. Legítimo. Muchos brindaron por su atajo hacia el Santiago Bernabéu en detrimento azulgrana. Quién sabe si no sólo como inquilino de una final. Al fin y al cabo ha sido el virus contra el Barça y quizá algún día importe su modelo a otras ligas. Y ganará, por qué no. Y será bendecido por quienes no tienen más objetivos que ese. Ser resultadista siempre es una tentación, por mucho que se rebata en tertulias y manuscritos. Qué más da. Lo que cuenta es que Mourinho y su Inter estarán en la final. O al menos es lo que prevalecerá en el calcio y entre los antibarça. Luego habría que ver cómo se abriría paso, por ejemplo, en un fútbol como el español, afortunadamente nada refractario a la casquería. Aunque en estos tiempos del éxito a toda costa, gente como Mourinho no tiene precio."
Dejando aparte las chorradas que dice, ¿qué eso de los "manuscritos"? ¿Pero es que hay algún periodista que escriba sus artículos a mano? ¿Y lo de la "liga refractaria a la casquería"? ¿No querrá decir más bien "afortunadamente, nada receptiva a la casquería"? Joder, Sámano, que estás en un periódico de supuesto prestigio, un poco de aseo formal por lo menos, aunque la mediocridad no te la sacudas ni con salfumán.
Un tío con cara de panoli llamado Pablo A. Iglesias defeca un excremento llamado No quiero a Mourinho en elsemanal.es. Ya, ya sé que este tipo es un don nadie, pero su columna resume muy bien lo expresado por muchos presuntos madridistas en las últimas semanas, especialmente en los comentarios de los diarios digitales: "José Mourinho es el hombre de moda. Pero a mí no me gusta. Su manera de trabajar, de afrontar la vida y de tratar a los demás no va conmigo. Tampoco casa con el estilo, el señorío y las buenas formas que siempre distinguieron al Real Madrid. (...)
Habría que organizar una protesta masiva a las puertas del estadio contra el totalitarismo que se practica en el club. A los que no están de acuerdo con el presidente -como Raúl González- se les arrincona en el banquillo con la excusa de que está acabado pero ahora pretenden fichar en Italia a golpe de talonario a jugadores con la misma edad que el delantero español.(...)
Florentino Pérez regresó sólo hace un año a la Presidencia con la promesa de crear un gran equipo que jugara bien al fútbol. Ahora, renuncia a su compromiso al fichar a Mourinho, que ante el Barça jugó las semifinales 90 minutos encerrado en su área y luego alzó campeón de Europa al Inter de Milán con un porcentaje de posesión del 33 por ciento. ¡Campeón... del aburrimiento!"
Joder, casi me da penilla este hombre de lo tonto que es. No se le nota nada permeado por lo que ha leído por ahí, no. ¡Y qué dignidad en la defensa del arrinconado Baúl! Que monte la concentración esa, por favor, sería un espectáculo inolvidable. En Facebook también lo ha sugerido un grupo de panolis terminales.
Bueno, ya os hacéis una idea del panorama. Otros integrantes del escuadrón antimourinhista serían la foca de la Colino, Perro Pablo, Lama el amigo de los mendigos, Miguelito Serrano, Juanqui Rivero... De todos modos, una figura tan carismática como Mou ha logrado reunir a no pocos adeptos dentro del gremio preiodístico, entre los que se encuentran Axel Torres, Enrique Ortego, Iñaki Cano, Alfredo Huevo Duro y, cómo no, Inda, aunque éste básicamente ejerce de altavoz de Florentino. También existen unos pocos neutrales, como Diego Torres, y veletas absolutos como Relaño, el ventajismo hecho grasa, y Roncero
Los bandos, en fin, están muy definidos, aunque los antis son mayores en número y más virulentos. Sin duda uno de los grandes placeres de la etapa mourinhana será verlos sufrir como perros, ya lo creo. ¡Ojalá nos dure el portugués una década! Quiero terminar la entrada diciendo que cualquiera que haga cualquier amago de spoiler del final de Perdidos en los comentarios será bloqueado inmediatamente y de por vida.