En el segundo juego, lo que había era una tia en concreto la cual, tras acostarte con ella, despertabas viendo a su padre apuntándote a la cabeza con una escopeta de dos cañones, obligándote a casarte con ella o morir... que juegazos... lástima que en este no vaya a haber situaciones humorísticas.
PD: Por cierto, luego podías vender a tu esposa a traficantes de esclavos... que juegos...