Han tenido que pasar 21 años para ver una lista en la que no aparecen ni Cristiano Ronaldo ni Leo Messi. A veces no somos conscientes
de lo que hemos sido testigos. Es el equivalente deportivo a la época
de la carrera espacial. Una rivalidad sin precedentes, y sin expectativas
de repetirse.
Porque sí, te lo podrán contar, pero nunca será lo mismo que haber visto en vivo y en directo cómo se escribían las páginas más gloriosas
de la historia del fútbol. Es como cuando te hablan
de Pelé, Di Stéfano o Puskas. Es difícil imaginar su verdadera dimensión y el impacto que tuvieron estos jugadores en el recuerdo
de quienes los vieron hacer magia sobre los terrenos
de juego.
En fin, supongo que hemos tenido suerte
de ser coetáneos
de estos dos cracks. Ojalá en el futuro podamos volver a ver algo parecido, aunque lo dudo mucho...