No es necesario que sea un personaje plano para que sea detestable. Se me ocurren varios malvados de diferentes JRPG que no son para nada personajes planos pero que realmente te hacen sentir que deben ser aplastados.
En cambio el malo de Symphonia a mi me despertaba la más absoluta de las indiferencias. No hay un componente personal que lleve al enfrentamiento entre los heroes y el malvado, si no que son las circunstancias las que los empujan a ese duelo. Para ilustrar mejor esta explicación diré que muy diferente hubiera sido si el heroe del juego, el prota absoluto, hubiera sido:
Que por cierto, jugar TODO el juego desde el punto de vista de ese personaje me parecería un juegazo. Ahí SI que hay un pasado en común y un componente personal.
Yo en un juego de estas características prefiero algo más épico, más emotivo que un "pues si hay que ir, se va". No sé si "mexplico"
En "Baten Kaitos" desde el principio Kalas, alias "Iñigo Montoya", se dedica a perseguir al asesino de su padre. Imagino que después la historia evolucionará a algo más complejo pero ya tienes ahí un génesis vs. némesis , nada más empezar el juego, que no encuentras en casi todo Symphonia. Y digo "casi" porque siempre nos quedará el enfrentamiento:
Pero es que este enfrentamiento es tan forzado y artificial que resulta menos emotivo de lo que en realidad debió haber sido.
Un saludo