Capitulo 1
Llegaron a donde estaban los oficiales y les hablo así, caballeros buenos días permitan q me presente, soy Anthony sylt.
Verán ustedes, necesito hablar con el capitán de la fragata sophie le traigo un sobre del almirantazgo y pensé que ustedes podrían ayudarme a entregárselo en mano.
Buenos días contestaron todos los oficiales, señor Sylt si le apetece, le contesto uno de ellos, nos puede acompañar allí, estamos esperando un bote q nos llevara a ese barco y le pondremos en contacto con nuestro capitán, el señor Edoj.
-el capitán Edoj?, no tenia noticias de q fuera ese el capitán de la fragata.
-Lo es desde hace poco tiempo, fue destinado a la fragata hace solo unos meses.
-En realidad todos somos nuevos en su dotación, ya q esta fragata es la ultima q salió de los astilleros de su majestad.
Anthony pensó en q alguien había movido algunos hilos, para q el capitán fuese ese precisamente. No pudo reprimir una sonrisa, al recordar a su amigo el capitán Edoj.
Sin q se dieran cuenta el bote llegó al cantil y a una orden del guardiamarina q lo mandaba todos los marineros, q iban impecablemente vestidos como si fueran a pasar revista, levantaron sus remos para atracar en el muelle.
Le invitaron los oficiales a subir al bote, y se coloco junto al q había hablado en la popa.
Cuando estuvieron todos, el guardiamarina pidiendo permiso a sus superiores, ordeno q separaran el bote del muelle con los bicheros y q introdujeran los remos de nuevo en el agua, para seguidamente empezar a remar en dirección a la Sophie.
Conforme se iban acercando, Anthony no podía dejar de mirar la fragata, era muy estilizada, nunca había visto nada igual, llevaba en los palos, unas prolongaciones de los mástiles, q les hacian parecer q no tuvieran final y extrañado le pregunto al oficial.
Este le dijo q eran unos palos llamados, masteleros y mastelerillos y su función era, la de recoger el viento lo mas arriba posible cuando no soplaba abajo.
También le dijo, q era un prototipo de fragata, q a pesar de las pruebas realizadas, aun no estaba del todo ajustada para navegar a toda velocidad, le dijo q tenia lo ultimo q se había inventado en cañones.
Anthony pensó, este oficial no ha pensado q yo podría ser un enemigo, un espía infiltrado en sus líneas y me esta contando todo acerca de la fragata...
Conforme se acercaban iban destacándose las portas negras de los cañones y se veía el incesante ir y venir de gente q corría por la cubierta en todas direcciones, había marineros terminando de dar los últimos toques de pintura, otros se afanaban en colocar bien las velas q estaban bien enrolladas en sus vergas.
Por fin el timonel del bote maniobro con pericia, para ponerse al costado de la fragata sin hacerle ningún arañazo. Por lo q había visto hasta ahora, los marineros parecían encantados con su barco nuevo y lo mimaban...
Empezaron a subir uno a uno por la pequeña escala tallada en la fragata y cuando llegaron a cubierta, el oficial q había hablado con el se dirigió a uno de los guardiamarinas diciéndole.
- señor pit dele mis saludos al capitán y dígale q ha llegado a la fragata el señor Anthony Sylt, dígale q si es tan amable de recibirle y que trae correo del almirantazgo...
El guardiamarina se fue corriendo a cumplir su cometido.
Mientras esperaba, Anthony no pudo dejar de apreciar, aunque fuera lego en la materia, el cuidado y esmero q habían puesto los marineros en todos y cada uno de los cabos q había en la cubierta, esta estaba resplandeciente después de q los marineros la limpiaran con piedra arenisca antes de amanecer.
De pronto desde el alcázar salió un tipo enorme... con los faldones de la camisa por fuera y el pelo, q lo llevaba largo, sin recoger en una coleta como era habitual.
Se quedo un momento parado mirando a los recién llegados.
Y descubrió a una figura menuda, su cara reflejo una enorme sonrisa se dirigió hacia él presuroso y rodeándole con sus enormes brazos le dijo amigo mío, q me parta un rayo si pensaba q algún día volvería a verte...