La agencia de noticias
Reuters publica que, tras
desprenderse de Honor, Huawei habría iniciado las negociaciones para vender las marcas telefónicas P y Mate, lo que en la práctica supondría su renuncia como fabricante de teléfonos móviles de gama alta. Esta información habría sido confirmada por dos fuentes de primera mano y con conocimiento de la operación, que por ahora aún se encuentra en una etapa inicial.
De acuerdo con dichos confidentes, Huawei estaría negociando la venta con un consorcio de firmas de inversión tuteladas de alguna forma por el gobierno de Shanghái, y aunque a priori las conversaciones aún no están avanzadas, habrían comenzado hace ya varios meses. Reuters asegura que Huawei lleva valorando la venta de dichas marcas como mínimo desde el pasado mes de septiembre, coincidiendo con el
fin del suministro de chipsets Kirin de gama alta para sus teléfonos.Al parecer, Huawei aún mantiene una posición exploratoria del asunto, puesto que sigue intentando desarrollar sus propios
chipsets Kirin de alto rendimiento sin utilizar tecnologías que los hicieran de nuevo objetivo de las
sanciones del gobierno estadounidense. Un desafío enorme, tanto por las patentes involucradas en el desarrollo de procesadores móviles como por el hecho de que China carece de factorías con la capacidad de producir nodos competitivos con tecnología estrictamente nacional.
Las fuentes de Reuters habrían señalado que precisamente este es el motivo por el que Huawei se encuentra en este brete. La ausencia de servicios móviles de Google puede solventarse usando
su propio ecosistema, pero llegarán un momento en que Huawei se quede sin
chipsets, y en ese punto su continuidad en la gama alta estará prácticamente anulada si para entonces no tiene listo su propio hardware. Según las estimaciones de varios analistas, Huawei agotará sus existencias de chipsets Kirin a lo largo de este año.
Según ha declarado un portavoz de Huawei, estas informaciones son "rumores infundados". "Huawei no tiene tal plan", ha señalado la compañía en respuesta a las preguntas de Reuters. Asimismo, el gobierno de Shanghái asegura no tener constancia de los hechos. Cabe señalar en cualquier caso que la agencia de noticias
hizo saltar la liebre de la venta de Honor.Fuente: Reuters