IBM ha presentado una solicitud para ampliar su cartera con una patente de lo más peculiar. Se trata de un sistema para proteger a los titulares de derechos de autor, una tecnología que
impediría imprimir texto o imágenes que pudieran estar infringiendo los derechos de autor.
Lo cierto es que cada semana se imprimen en el mundo cientos de millones de documentos y es muy probable que muchas de esas impresiones se realicen sin los derechos necesarios para poder hacerlo legalmente. Según IBM, estas impresiones pueden ser especialmente problemáticas para titulares de derechos como los autores de libros y, bajo esta premisa, han presentado una solicitud de patente para una tecnología que tiene como objetivo contrarrestar el problema.
A través del título
Copyright Infringement Prevention, el principal objetivo de la patente es restringir la funcionalidad de las impresoras, de forma que sólo se procesarían las tareas cuando la persona que está imprimiendo tiene permiso para hacerlo. ¿Cómo? Según IBM, cuando una impresora recibe un trabajo de impresión se analizará el contenido de aquellos materiales con copyright potencial. Entonces el sistema buscaría coincidencias en una base de datos que, de resultar positivas, no se permitiría imprimir el material deseado. Como se puede leer en la patente:
El equipo, en respuesta a la identificación de cualquier texto, imagen o indicativo de material con derechos de autor potencial, identifica ese potencial material con copyright en el archivo. Después el equipo determina si el archivo se puede imprimir en base, al menos en parte, a ese potencial material con derechos de autor identificado.
La patente describe diversas variaciones sobre el enfoque final e IBM señala que podrían mejorar esa base de datos que define el estado de los derechos de autor accediendo a los propios recursos públicos, como la propia Oficina de Registros de Copyright en Estados Unidos.
Según la compañía, existe una amplia variedad de aplicaciones para su patente. Por ejemplo se podría incluir también una característica que proporcione a los usuarios una serie de “opciones para adquirir permisos” para imprimir o copiar algo.
La patente no entra en detalles sobre el mercado potencial al que iría dirigido este tipo de impresoras, y es que posiblemente este sea el principal escollo de la misma. Parece difícil pensar que el público en general esté interesado en una impresora o que limite lo que puedes hacer según el copyright, quizá por ello su público esté más enfocado al entorno empresarial.