El tema del congelado suele ser contraproducente en un equipo de uso diario. Sobre el papel, y tal como te lo han contado, es muy efectivo y una solución 100% resistente a virus y otros tipos de malware (incluído el ransomware), no lo neguemos, pero ello también tiene su parte negativa.
"Congelar" el sistema supone "congelarlo" para todo hasta el próximo reinicio. Esto es, que si instalas un programa que no te interesa y reinicias, se borra, pero también supone que no puedes actualizar, no puedes instalar otros programas que sí que te puedan interesar o incluso perder documentos si los dejas almacenados en aquellas unidades marcadas como congeladas. Todo cambio en el sistema es absolutamente temporal hasta que no reinicies el sistema en modo "descongelado". Y esto, puede resultar altamente contraproducente para un equipo normal.
Este sistema está ideado más bien para ordenadores de uso temporal y/o acceso público, por los que pasa mucha gente; para evitar situaciones imprevisibles, instalación de software pirata, documentos ilegales o cualquier otra tropelía de algún usuario anónimo.
Yo, personalmente, desaconsejo absolutamente el usarlo en un entorno doméstico, o en equipos de uso normal.