Tengo ganas de volver a Debian, y quería instalarlo en un disco duro conectado por usb, para probarlo sin tocar los otros sistemas que tengo instalados en el equipo, por si algo no termina de ir bien o gustarme en Debian, o cualquier cosa. El equipo que tengo tiene 3 discos, un SSD y dos normales, pero el que importa es el SSD, que es donde están instalados Win10 y Kubuntu actualmente. Es el disco que se arranca y donde está instalado Grub.
Lo que no tengo claro es cómo indicarle a Debian que me instale su propio Grub en el disco donde instalo Debian, y no me toque lo demás. Con Ubuntu esto lo hice alguna que otra vez sin problemas, pero en Debian es un poquito diferente. Lo instalé y me preguntó si quería instalar Grub en el disco principal, a lo que contesté que no, porque imaginé que tal disco sería el SSD (que aparece como /dev/sda), pero igual estoy equivocado. Así que al decirle que no, escogí el disco donde instalé Debian. El problema: al reiniciar y arrancar desde ese disco, no me arrancaba, me salía el típico error de carga de sistema del gestor de arranque de Win. Así que imagino que no tocó el MBR del disco.
Luego probé a, desde Kubuntu, hacer un grub-update. Esto me detectó el Debian instalado, pero me daba cierto error al intentar arrancarlo, como que no encontraba el disco... además tampoco es la forma en la que quería instalarlo para hacer pruebas.
La solución más sencilla podría ser desenchufar todos los discos, instalar Debian y luego enchufarlos de nuevo, pero... ¿hay otra forma?