La
revolución multinúcleo de Intel solo acaba de comenzar. El fabricantes de procesadores ha
anunciado hoy en la feria Computex 2018 el lanzamiento este mismo año de un nuevo chip que aglutinará un total de 28 núcleos en un único
socket. Un incremento más que notable frente a los 18 núcleos ya introducidos con el reciente
Core i9 Extreme Extreme y que resulta casi imperativo para recuperar el terreno perdido en la
batalla numérica contra AMD.
Desvelado de forma extraordinariamente breve, casi de pasada, se desconocen prácticamente todos los detalles técnicos sobre este procesador, que funcionará a 5 GHz y ha obtenido una nota de 7.334 puntos en Cinebench. Intel no ha señalado la microarquitectura concreta en la que estará basado ni el segmento que busca atacar, aunque parece probable que esté dirigido a estaciones de trabajo.
En cuanto al precio, mejor si ni siquiera comenzamos a especular. El Core i9 Extreme tenía una tarifa de lanzamiento de 1.999 dólares.
Asimismo, durante su conferencia en la Computex 2018 Intel ha
desvelado el nuevo Core i7-8086K. Su numeración no es una coincidencia, y es que este año se cumplen cuatro décadas desde que la compañía lanzó su icónico
8086, el procesador que revolucionó toda una industria. Concebido como una edición limitada, viene de serie con una velocidad de reloj de 4 GHz y tiene la capacidad para trepar hasta los 5 GHz, con la posibilidad de seguir subiendo gracias a su multiplicador desbloqueado.
El precio del nuevo procesador es por ahora desconocido, pero 8.086 afortunados tendrán una oportunidad de llevarse uno gratis participando en el sorteo que Intel acaba de lanzar
en su sitio web.
Intel busca reducir el consumo de las pantallas a la mitadPor último, Intel ha anunciado nuevos progresos junto a Sharp e Innolux para reducir el consumo de las pantallas de los ordenadores portátiles. Este trío de empresas ha desarrollado lo que denominan como Intel Low Power Display Technology, que integra un panel LCD de 1 W gracias al cual será posible recortar a la mitad el consumo energético de una pantalla.
La tecnología en cuestión tiene algunos inconvenientes, como el hecho de que requiere el uso de los procesadores gráficos integrados de Intel, cosa que por otro lado era de esperar. Durante la demostración oficial Intel ha mostrado un prototipo basado en el Dell XPS 13, señalando una mejora de entre cuatro y ocho horas de autonomía en función del uso, con una capacidad de reproducción de vídeo de 25 horas.
Intel no ha facilitado todavía una fecha de integración para esta tecnología y tampoco hay datos concretos sobre información como el impacto de la luminosidad y pulgadas en las estimaciones de consumo. Es de esperar que la compañía facilite más información a lo largo de los próximos meses.
Fuente: Intel