Sí, yo estoy con Ninguno. Una poesía -y un texto literario en general- se define como tal debido a que hay un lector que asume un papel importantísimo en el proceso. Podemos escribir, lo cual es arte, pero si no lo mostramos estamos perdiendo una parte del proceso vital. En el momento en que se muestra no se puede dejar al lector el papel pasivo. Todo lo contrario. Y opino que es el lector el que hace suya la poesía, sin pedir consejo al autor.
Sobre lo que comenta muad-did referente a la película de "el club de los poetas muertos", hay que tener en cuenta que una persona metida en la labor docente y que enseñe literatura puede seguir dos caminos: seguir opiniones contrastadas de otros autores, o regirse por su propio criterio para motivar al alumnado para que amen la literatura. Porque una cosa es estudiar literatura, y otra apreciarla de verdad. Y esto último sólo ocurre cuando recibimos el estímulo adecuado.
Lo de los catedráticos y críticos en general es un tema interesante, porque de hecho, la crítica es otra manifestación del arte literario. Me encanta leer crítica, más que nada para contrastarla con mis ideas. Objetivamente, si nos enfrentamos a un texto, nuestras ideas tienen exactamente la misma validez que la de un catedrático, si sabemos exponerlas y razonarlas. La literatura no es una ciencia exacta. Ahí radica su encanto: podemos interpretar un texto sin pervertir su sentido original.
Como alguien que escribe poemas, disfruto viendo cómo las interpretáis, aunque no se asemeje a mi idea original. Eso es lo menos relevante, y me parece increíble cómo las adaptáis a vuestra forma de ser. En el momento que las posteo, dejan de ser mías, y se hacen vuestras.
Otro tema interesante aparece cuando nos preguntamos si los autores dicen la verdad sobre lo que escriben, ya que hay casos muy famosos que indican lo contrario, pero este ya es otro apartado. Generalmente, me suele interesar muy poco lo que un autor opina de su obra. Saludos!!