Tom Traubert escribió:La primera ministra saliente, la socialdemócrata Jóhanna Sigurdardóttir, no ocultó su decepción ante el tremendo batacazo sufrido en las urnas: "Estoy muy triste. Es un resultado democrático, pero las pérdidas son mayores de lo previsto. Hemos que tenido que adoptar medidas impopulares como recortes y subidas de impuestos, pero esperaba que consiguiésemos más votos".
Revolución islandesa, sí, sí...
La revolución islandesa, además de desde el punto de vista de movilización social, tuvo también que ver con cómo decidieron afrontar qué hacer con la deuda: en lugar de convertir la deuda privada en pública, dejaron que siguiera siendo privada y que los accionistas/bonistas/etc. de los bancos quebrados asumieran las pérdidas. Es decir, la lógica del mercado que aquí también nos vendían y no han cumplido.
Y el resultado es que la evolución económica islandesa ha sido bastante mejor que la de países de la eurozona como el nuestro.
http://internacional.elpais.com/interna ... 07852.htmlSí cambiaron algunas cosas en cuatro años. La economía volvió a crecer (1,6% en 2012) y el desempleo se situó alrededor del 5% (llegó a alcanzar el 10%).
Luego, los resultados electorales del 2009:
http://es.wikipedia.org/wiki/Elecciones ... ia_de_2009Como puede verse, la coalición ganadora sacó un 51,1% de los votos; y "los del desastre" (el Partido de la Independencia y el Partido Progresista) un 38,5% de los votos.
Esto recuerda a las actuales encuestas en España, donde incluso después de las gestiones desastrosas del PSOE y del PP, estos siguen teniendo un suelo electoral muy amplio.
En El País leo, respecto a las elecciones de 2013:
http://internacional.elpais.com/interna ... 07852.html...el PI, con Bjarni Benediktsson como aspirante a la jefatura del Gobierno (26% de los votos), y el PP, de la mano de Sigmundur David Gunnlaugsson (24%)
Es decir, el PI ha obtenido respecto a las elecciones de 2009 un 2.3% más, y el PP un 9,2% más.
Según el artículo de El País, una de las promesas estrella del PP (que es quien más se ha recuperado) ha sido:
Protección significa hoy en Islandia aliviar la deuda de los hogares (en torno al 100% del PIB). Prácticamente todos los islandeses arrastran un préstamo. El 90% de las hipotecas están indexadas a la inflación y esta ronda el 4%. Y es por aquí por donde se ha colado el Partido Progresista. Su promesa de campaña: renegociar con los acreedores –muchos de ellos hedge funds con activos en la banca- para cancelar parte de la deuda familiar. “Los bancos que cayeron”, explica en un intercambio de correos la secretaria del PP, Eygló Thora Hardardóttir, “tienen la responsabilidad de la crisis de la deuda, y creemos que los hogares tienen derecho a reclamar al menos una parte del daño”.
Eso si los hedge funds se aprestan a negociar. “No está bien prometer algo que no está en su mano”, apunta Kolbeinn Óttarsson, del diario conservador Frettabladid. “Pero la gente necesita escuchar buenas noticias y siempre se cree en la solución mágica”. La que sale de la varita de Bjarni Benediktsson (PI) pasa por una bajada de impuestos y una reducción de la carga de la deuda vinculada a los precios.
Esto de
"Pero la gente necesita escuchar buenas noticias y siempre se cree en la solución mágica” me suena también

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