Un grupo de jóvenes protagonizó ayer dos actos de protesta en el Fórum 2004 de Barcelona en denuncia de la presencia del juez de la Audiencia Nacional española Baltasar Garzón. Según informaron desde la Coordinadora Antirrepressiva de la Vila Gràcia, cuando el juez debía tomar la palabra tres personas se situaron frente a él con «banderolas, lanzando octavillas y acusando al juez de amparar la tortura». Aunque no se les permitió intervenir, interrumpieron el debate más de diez minutos, hasta que fueron retenidos por los servicios de seguridad y la Policía española.
Mientras tanto, otras cinco personas se encadenaron en las puertas de acceso al Fórum en solidaridad con tres jóvenes del barrio de Gràcia «que están bajo el riesgo de ser juzgados por la Audiencia Nacional», agregó la Coordinadora.
Recordaron que «200 ciudadanos vascos torturados han comparecido frente a Garzón y él siempre ha mirado hacia otro lado». Añadieron, a su vez, que el juez «está pendiente de ser condenado en Estrasburgo por las torturas sufridas en 1992 por 17 independentistas catalanes» y le acusaron de «permitir, tolerar y promover la tortura amparándose en la legislación antiterrorista y en el tribunal de excepción que es la Audiencia Nacional».
En relación a esta acusación, Garzón dijo que la jurisdicción sobre estos asuntos compete a los juzgados de lugar y no a la Audiencia Nacional, y remarcó que las protestas de ayer evidencian que «existe la libertad de expresión».
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salu2