Pues a mí no me parecía mal del todo. Él no iba a ser ponente, sino que iba como invitado de otro ponente. Y no iba a cobrar un duro.
Sería algo como que en una charla sobre drogas participasen alcohólicos anónimos o (ex-)drogadictos, que seguro que saben más los que lo han vivido por dentro que cualquier otra persona.