Los problemas de Nintendo con el
drift en los Joy Con de Switch van camino de crecer un poco más después de que la Asociación Europea de Consumidores (BEUC, por sus siglas en inglés) haya pedido a la Comisión Europea que investigue a la compañía japonesa por obsolescencia programada y omisión de información. BEUC reúne a más de 40 organizaciones de consumidores y tiene como objetivo coordinarlas para promover, defender y representar los intereses de todos los europeos.
Para los profanos, el conocido como Joy-Con Drift es un problema que presentan los mandos de Nintendo Switch que se produce cuando el periférico detecta y ejecuta un movimiento que no existe. El fallo apareció poco después del lanzamiento de la consola y Nintendo lo ha
reconocido y
pedido disculpas por ello, pero aún se espera que presente una solución. Ahora desde Europa los consumidores piden responsabilidades a la compañía, que en Estados Unidos tiene abiertas demandas colectivas por este mismo motivo.
La BEUC explica en su
nota de prensa que tiene casi 25.000 quejas y la mayoría (el 88 %) de testimonios recogidos de consumidores de toda Europa, incluyendo Francia, Bélgica, Países Bajos, Portugal, Italia, Noruega, Eslovaquia, Eslovenia y Grecia, dicen que el mando Joy-Con presentó problemas durante los dos primeros años de uso. La asociación ha presentado una queja en nombre de los países afectados, pero en el texto se exige a la Comisión Europea una investigación a nivel europeo, así que España formaría parte de ella.
“La Asociación Europea de Consumidores y sus miembros piden que se lleve a cabo una investigación a nivel europeo sobre este problema y que Nintendo se vea obligada a solucionar los fallos prematuros de su producto”, dice la BEUC en su comunicado. “Hasta entonces, los mandos tienen que ser reparados de forma gratuita y los consumidores deben estar informados correctamente sobre el periodo de vida limitado del producto. Desde que salió al mercado, la consola ha vendido más de 68 millones de unidades, muchas de ellas en Europa”.
El paso dado por hoy la BEUC puede ser el primero de muchos o caer en saco roto. Todo dependerá de si la Comisión Europea hace caso a la queja o no. En caso negativo, tocará seguir tirando del servicio técnico de Nintendo, pero si hay investigación la compañía japonesa recibirá más presión y el curso del caso dejaría de estar en sus manos.