La realidad es que si se siguen utilizando. Por un motivo u otro, muchísimas empresas grandes siguen teniendo fax para ciertas cosas, o compatibilidad con fax, es decir, sistemas que ante una llamada de fax lo convierten en un mail o al revés, un mail que puedes hacer llegar como documentos a un fax tradicional.
Pero raro es encontrar una empresa grande que no tenga algún fax por algún lado.