Después del mensaje en 7:10, aparece la casa de Link del Ocarina of Time. ![[360º]](/images/smilies/nuevos/vueltas.gif "como la niña del exorcista")
![[sati]](/images/smilies/nuevos2/demonio.gif "demoniaco")
) 
vaya tontadas de videos!!! ![[+furioso]](/images/smilies/nuevos/furioso.gif "muy furioso")
![[hallow]](/images/smilies/nuevos/hallowen.gif "calabaza")
Cranky_kong escribió:serratix escribió:Me ha gustado la historia. Aunque sea fake está bien montada.
¿Sabéis algo más de maldiciones o poltergeist en videojuegos?
Yo sólo conozco lo del Polybius (que no es lo mismo, claro) y lo del hilo fantasma de EOL.
Pues a parte del Tail Doll que ya se ha comentado, yo tampoco conozco ninguna más. Estaría curioso saber alguna otra leyenda urbana de los videojuegos.
![[+risas]](/images/smilies/nuevos/risa_ani3.gif "más risas")
4ingeru escribió:que se sabe hoy¿?
I read on the Creepy + Pasta (and noticed it myself). Ben died on April 23, according to the story. Ben's last save was on "THE FINAL DAY: 23:04". Reverse the time and it's 04/23. April 23rd.
RCR3 escribió:Yo conozco otra "leyenda urbana de videojuegos" , la verdad es que me al contó un amigo , la principio no me la creía , pero cuando pude ver con mis propios ojos el juego en cuestión... ´me quedé horrorizado también.
La historia comienza una tarde allá por el 1999. Paco (le llamaremos así para preservar su intimidad) acababa de recibir una espectacular Nintendo 64 por su cumpleaños .
Tras unas semanas jugando al Fifa y al Mario Kart decidió gastar sus ahorros en un nuevo cartucho, del que había leido maravillas. Pero el juego estaba agotado en todas las tiendas habituales, desconsoslado decide volver a su casa a seguir dándole al Fifa cuando descubre un pequeño videoclub en el que nunca se había fijado, como había algunos juegos de N64 en el escaparate decide entrar y preguntar por su ansiado cartucho.
El video club estaba regentado por un extraño tipo , que le dice que si tiene el juego que Paco anda buscando, pero que no lo compre que se arrepentiría, que había mucho horror en ese cartucho. Paco , pensando que el tendero estaba colocado o loco , no le hace caso y compra el cartucho y lo lleva a su casa.
Una vez en casa conecta su N64 y llama a su hermano pequeño Carlitos para que viese el esperado juego. Pero al arrancar el juego unas imágnes grotescas, horrorosas , salidas de la mente de algún taradao psicopata inundan la pantalla, ni Paco ni su hermanito habían contemplado un horror así nunca .
Carlitos llora y chilla horrorizado , mientras su hermano está paralizado ante la pantalla como si no se creyese lo que estaba viendo. Pasados unos interminables segundos de horror el hermano pequeño se arma de valor y desenchufa la consola.
La pantalla queda en negro , el horror se ha ido , pero ni Paco ni Carlitos tubieron valor de jugar a más videojugos , aquel cartucho los marcó, las imágenes de ese juego acabaron con su inocencia , con su infancia con su fe en la bondad humana.
Aquel videojuego era.
![[plas]](/images/smilies/aplauso.gif "Aplausos")
![[qmparto]](/images/smilies/net_quemeparto.gif "Que me parto!")
. RCR3 escribió:Yo conozco otra "leyenda urbana de videojuegos" , la verdad es que me al contó un amigo , la principio no me la creía , pero cuando pude ver con mis propios ojos el juego en cuestión... ´me quedé horrorizado también.
La historia comienza una tarde allá por el 1999. Paco (le llamaremos así para preservar su intimidad) acababa de recibir una espectacular Nintendo 64 por su cumpleaños .
Tras unas semanas jugando al Fifa y al Mario Kart decidió gastar sus ahorros en un nuevo cartucho, del que había leido maravillas. Pero el juego estaba agotado en todas las tiendas habituales, desconsoslado decide volver a su casa a seguir dándole al Fifa cuando descubre un pequeño videoclub en el que nunca se había fijado, como había algunos juegos de N64 en el escaparate decide entrar y preguntar por su ansiado cartucho.
El video club estaba regentado por un extraño tipo , que le dice que si tiene el juego que Paco anda buscando, pero que no lo compre que se arrepentiría, que había mucho horror en ese cartucho. Paco , pensando que el tendero estaba colocado o loco , no le hace caso y compra el cartucho y lo lleva a su casa.
Una vez en casa conecta su N64 y llama a su hermano pequeño Carlitos para que viese el esperado juego. Pero al arrancar el juego unas imágnes grotescas, horrorosas , salidas de la mente de algún taradao psicopata inundan la pantalla, ni Paco ni su hermanito habían contemplado un horror así nunca .
Carlitos llora y chilla horrorizado , mientras su hermano está paralizado ante la pantalla como si no se creyese lo que estaba viendo. Pasados unos interminables segundos de horror el hermano pequeño se arma de valor y desenchufa la consola.
La pantalla queda en negro , el horror se ha ido , pero ni Paco ni Carlitos tubieron valor de jugar a más videojugos , aquel cartucho los marcó, las imágenes de ese juego acabaron con su inocencia , con su infancia con su fe en la bondad humana.
Aquel videojuego era.
RCR3 escribió:Yo conozco otra "leyenda urbana de videojuegos" , la verdad es que me al contó un amigo , la principio no me la creía , pero cuando pude ver con mis propios ojos el juego en cuestión... ´me quedé horrorizado también.
La historia comienza una tarde allá por el 1999. Paco (le llamaremos así para preservar su intimidad) acababa de recibir una espectacular Nintendo 64 por su cumpleaños .
Tras unas semanas jugando al Fifa y al Mario Kart decidió gastar sus ahorros en un nuevo cartucho, del que había leido maravillas. Pero el juego estaba agotado en todas las tiendas habituales, desconsoslado decide volver a su casa a seguir dándole al Fifa cuando descubre un pequeño videoclub en el que nunca se había fijado, como había algunos juegos de N64 en el escaparate decide entrar y preguntar por su ansiado cartucho.
El video club estaba regentado por un extraño tipo , que le dice que si tiene el juego que Paco anda buscando, pero que no lo compre que se arrepentiría, que había mucho horror en ese cartucho. Paco , pensando que el tendero estaba colocado o loco , no le hace caso y compra el cartucho y lo lleva a su casa.
Una vez en casa conecta su N64 y llama a su hermano pequeño Carlitos para que viese el esperado juego. Pero al arrancar el juego unas imágnes grotescas, horrorosas , salidas de la mente de algún taradao psicopata inundan la pantalla, ni Paco ni su hermanito habían contemplado un horror así nunca .
Carlitos llora y chilla horrorizado , mientras su hermano está paralizado ante la pantalla como si no se creyese lo que estaba viendo. Pasados unos interminables segundos de horror el hermano pequeño se arma de valor y desenchufa la consola.
La pantalla queda en negro , el horror se ha ido , pero ni Paco ni Carlitos tubieron valor de jugar a más videojugos , aquel cartucho los marcó, las imágenes de ese juego acabaron con su inocencia , con su infancia con su fe en la bondad humana.
Aquel videojuego era.
