Desde la primera mirada la bella liebre se habia quedado prendada del esquivo erizo. Todos los dias corria frente a su madriguera con la esperanza de verlo. Pero el erizo apenas salia, temeroso de que con sus muchas espinas hiriera por accidente a los demas, por ello solo salia de noche y evitaba a los demas animales del bosque.
La liebre enamorada se plantó una noche frente a la entrada de la madriguera con una gran zanahoria de su mejor cosecha.
-Señor erizo, le he traido esta zanahoria para usted, ¿por que no sale y la coge?.
Dijo hacia la madriguera, donde contesto la timida voz del erizo.
-Gracias señora liebre, pero si salgo puedo lastimarla con mis espinas.
-No lo creo, no pasara si sale despacio.
El erizo lentamente salio de la madriguera y acepto la zanahoria, intercarbiando algunas palabras con la liebre. Poco a poco, dia tras dia, erizo y liebre se tomaron confianza, incluso el erizo empezo a amar a la liebre, pues a ella no le intiminidaba sus espinas y lo trataba con dulzura.
Pero un día mientras paseaban la liebre tropezo con una raiz y cayo sobre el erizo clavandose una espina. El erizo aterrado salio corriendo. Tras pensarlo mucho se recorto todas las espinas para no volver a hacer daño a la liebre que tanto apreciaba. Esta cuando le vio le pregunto sorprendida:
-¿por que te has cortado tus bellas espinas señor erizo?-
-Por que no queria volver a hacerte daño- contesto el.
-Eres lo que eres, señor erizo, y de ti me enamoré, incluso de tus espinas, aunqué a veces me hagas daño con ellas se que nunca ha sido tu intencion herirme.
El erizo comprendio que no podia negarse a si mismo y nunca mas se recorto las espinas, que crecieron de nuevo bellas y afiladas. Con el pasar de los años liebre y erizo aprendieron juntos a superar estas espinas y nunca mas volvieron a hacerse daño.
P.D. mi primera fabula, hoy deseaba escribir algo diferente...