Según la revista New Scientist, esta filosofía de transferencia de archivos está siendo utilizada también para lograr dejar máquinas totalmente KO mediante la ejecución de ataques de denegación de servicio.
Darren Rennick de la empresa de seguridad Prolexic le comunicó a la revista New Scientist que este tipo de ataque estaba ocurriendo cada vez más a menudo.
Una demostración práctica de lo que se podía lograr con este medio fue mostrada por primera vez en la Polytechnic University en Brooklyn, New York, donde Keith Ross y Naoum Naoumov demostraron que las redes P2P pueden ser utilizadas para lanzar un ataque sin necesidad de 'secuestrar' ningún PC.
Lo que los hackers hacen es 'envenenar' la base de datos, introduciendo entradas falsas en las que indican que un fichero muy popular está localizado en la IP del objetivo al que quieres atacar. En ese momento los usuarios P2P comienzan a establecer conexión con la máquina objetivo para pedir ese fichero tan popular hasta que la red se colapsa.
Los investigadores afirman que incluso las redes BitTorrent están afectadas por esos ataques DoS, aunque estas hagan un particionamiento previo del fichero en pequeños trocitos.