Es bastante curioso, aunque yo no iría. Siete minutos dan pa' mucho, te puedes hacer mínimamente una idea de la persona con la que hablas y tal, lo chungo es tener que gastarse las pelas y no encontrar a nadie... no sé, no está mal la idea, pero me parece más interesante darse un volteo por la ciudad, gastarte el dinero en un par de cervezas y acercarte a aquella persona que te guste y sientas curiosidad por conocer, en fin, desde mi punto de vista, aunque hay gente que quizás no lo tiene tan fácil. Bueno, es mi opinión. Saludos.