Pues me acabo de pasar el juego hace escasos minutos (en PC por eso). El juego sigue la línea de su predecesor, repitiendo lo que hizo al original tan especial e intentando aportar nuevas mecánicas que para mi gusto no sirven para gran cosa. A diferencia del primero donde únicamente podemos escondernos emulando un juego del escondite, esta segunda parte tiene trozos donde se centra más en la acción, dándonos la opción de usar armas para terminar con nuestros acechadores. La torpeza y retardo de los controles en el ataque hace que los enfrentamientos se conviertan más en saber presionar el botón de ataque en el momento justo que en un momento de tensión de escondite como el primer juego donde la gracia era no ser descubierto. Además, el que ahora vayamos acompañados no aporta demasiado a los nuevos puzles. Se podrían haber esmerado más con los puzles aprovechando los dos personajes, ya que creo que en esta segunda parte los puzles son demasiado sencillos y evidentes. No han querido arriesgar en probar cosas nuevas.
Dejando de lado estas pequeñas objeciones, el juego deslumbra por su ambientazión. Es grotesco, macabro, siniestro pero bello al mismo tiempo. Se agradece la variedad de nuevos escenarios, pero el primero me pareció más oscuro y lúgubre. Donde Little Nightmares II supera a su predecesor es en el aspecto visual, los escenarios, texturas e iluminación están mucho más currados haciendo que cada pantalla sea una delicia para los ojos y para los oídos por esa magistral banda sonora y de ambiente.
En general al igual que el primero sigue siendo un juegazo, pero creo que el estudio ha ido a lo seguro, repitiendo todo lo que ya funcionaba sin querer arriesgar demasiado. Hacia el final del juego se hace uso de una nueva mecánica que es original y en ningún momento el juego repite en exceso alguna mecánica o puzle para terminar aburriéndonos, el ritmo es el correcto y el juego se pasa en un suspiro (casi 6 horas me debe haber durado a mí). Hay más variedad de enemigos, algunos bastante originales. Creo que lo que hizo tan magistral al primero eran esos encuentros con las figuras grotescas y ese juego continuo del escondite, donde en esta segunda parte se ha perdido un poco (son muy pocos momentos donde he sentido que haya estado jugando al escondite). También me ha parecido mucho más sencillo que el primero, algo que quizá algunos jugadores casuales agradezcan, pero esperaba encontrar mayores retos en la secuela. Si te gustó el primero te seguirá encantando el segundo, realmente ambos juegos son casi idénticos.
Nota: 8'5
(Al primero le di un 9 en su momento)