El éxito de
PlayerUnknown's Battlegrounds, un título que no deja de alcanzar hitos (el último el
millón y medio de jugadores simultáneos, muy por encima del máximo de Dota 2 en Steam) desde su lanzamiento en acceso anticipado, depende en buena medida de las posibilidades de diversión de su mundo abierto y un motor de físicas detallado aunque no necesariamente realista.
Ahora estas características junto a la inventiva de su comunidad de jugadores han redundado en la creación espontánea de un modo de juego que triunfa en las partidas en las que la mayoría de los jugadores acuerda seguir las reglas. Denominado "carrera de la muerte" y por el momento sin soporte oficial de BlueHole, este modo encomienda a los jugadores la obtención de una pistola y un vehículo durante los cinco primeros minutos, momento en el que se dará la salida desde el sureste del mapa a un recorrido que bordeando todo el mapa regresa casi al mismo punto.
A los participantes se les pide que se mantengan en el canal de Discord para la comunicación de cualquier incidencia pero por lo demás solamente se les exige el cumplimiento de las reglas mencionadas y el abstenerse de disparar hasta después de atravesar el primer puente. Los que no puedan conseguir un vehículo o se queden atrás pueden montar bloqueos parciales en la carretera al fin de hacerse con uno.
La
legendaria fiabilidad de los vehículos de PUBG contribuye al desarrollo frecuentemente alocado de las partidas bajo estas condiciones, y la próxima llegada de cuatro nuevos modelos (entre los que se encuentra uno basado en la clásica Volkswagen T1) seguramente seguirá la misma línea.
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