Al final creo que voy a escoger una segunda opción, que pasaría por instalar el sistema operativo en un SSD externo conectado a un puerto USB3.0. Se que jamás se conseguirán las velocidades de E/S como si fuera interno, pero desde luego será bastante más rápido que el actual HDD.
Los precios de los SSD externos también han bajado un montón, y creo que es una solución intermedia, rápida y sin riesgo de estropear nada.