Una más para la lista, me pasa exactamente lo mismo desde bien chiquitina, cuando me quiero dar cuenta ya tengo la mano en la boca. En los centros de salud tendrían que hacer sesiones tipo las que hacen para dejar de fumar ya que es un vicio malísimo y las manos con las uñas mordidas son feísimas por no decir lo antihigiénico que es. Lo que a mi me pasa es que no tengo nada de fuerza de voluntad y encima soy muy nerviosa y no me doy cuenta si alguién no me llama la atención.
Mi padre intentó de todo porque no lo puede soportar, pero nada ahi sigo. Me puso picante y lo flipaba colores cuando me las llevaba a la boca pero es una cosa que no puedes estar haciendo toda la vida y cuando dejó de ponermelo volví a las andadas. También intentó lo del esmalte este que venden en las farmacias, al principio era un asco pero llegué a acostumbrarme a ese sabor y ya me daba igual.
He llegado a dejármelas un poco largas porque tenía la boda de un familiar cercano y quería lucir las manos un poco bonitas, y enseguida que pasó la boda me las mordí como loca, verlas largas me daba más ganas y era como si tuviera el mono, yo que se, hasta que no me las mordí no estuve tranquila.
A ver si alguien nos da una buena solución porque yo no se que hacer.