Bueno, realmente hay cosas que influyen más que el propio formato.
Puede ser que compres un chollo de tela a buen precio y te resulte más interesante cualquier formato que no hubieras jamás imaginado. Es decir puedes obtener una 4:3 a buen precio y luego ajustar tu mismo el ancho de visión con pintura (si la pantalla es enrrollable) o con terciopelo si es fija. Acotando la superficie de proyección a lo que necesites.
Hay parametros a tener en cuenta... ganancia (dependiendo del proyector a usar), ancho de la pantalla, distancia de visionado... etc.
Ahora bien... cuidado con hacerte la idea de que vas a tener pelis en 16/9. Casi todas las películas se editan en 2:35 y no en 16/9.