Precisamente hoy he estado en la biblioteca pública, he visto El Fuego y me lo he leído del tirón. Y me ha impresionado, es crudísimo y da que pensar. Creo que es brillante en casi todo: la historia apocalíptica cada vez más angustiosa, la ambientación futurista distópica, esos diálogos y monólogos tan amargos e intensos, la narración, el coloreado con todo ese fuego en el climax, el montaje del prólogo... Muchas páginas tienen una fuerza... Pero no sé, para mí es algo curioso de leer una sola vez, no algo que me llene y a lo que vaya a querer volver.
Me pasa igual con los demás cómics españoles (y occidentales en general) que he leído. Es curioso, pero me parece que los álbumes de Rocco Vargas, Superlópez, El Capitán Torrezno, Blacksad... están a la altura de cualquier manga y sin embargo creo que si no existiera el manga tendría muy, muy poco comic en casa.