Mi amiga

Hola. Este es mi primer post en este foro. NO soy ni la mitad de lo que vosotros llegais a ser, pero me gustaria compartir con vosotros, lo que para mi fue realmente un desafia. La realización de este relato en una noche de soledad e insomnio. (no seais muy criticos ^_^)


"Todo venía desde un año hacia atrás. Llegamos a casa de una amiga, y sin percatarme de su presencia, allí estaba ella, con una sonrisa en su rostro que tan solo demostraban alegria de habernos vuelto a ver, tras un verano de distanciamiento. Recuerdo el primer dia que la ví bien entrado el curso. Era como los angeles, pasaba entre los pasillos con un aura luminosa a su alrededor, y me quedé embobado intentando observar su aspecto: era realmente preciosa, tenia el cabello ondulado, y se podía entrever como le acariciaba su grácil cuello. Tenia dos enormes perlas blancas y azules por ojos, cuya sensacion de mirada era pentrante hasta lo mas profundo de mi ser, la nariz era pequeña pero con una simetria perfecta. Los labios eran carnosos y estaban perfectamente marcados...tenia el cuerpo perfecto. Unas medidas que desearian todas las mujeres del planeta, con unos pechos duros y bien puestos, cuyos pezones marcados en su top provocaban en mi cierta sensación de excitación.

Pero pasaron las horas, los días, las semanas, etc....y mi actitud ante ella no era mas de contemplación. Estaba absolutamente anonadado por ella, mis músculos se paralizaban ante su presencia, era un sensación totalmente indescriptible e inusual en alguien como yo.

Y llego el gra dia, recuerdo perfectamente.....primavera, un dia soleado, pero con pocas nubes por el firmamento. Los arboles agitaban sus frondosas hojas por una breve brisa que nos acariciaba la piel a todos los que allí estabamos. Y llegó ella, con su sonrisa picarona en la cara, acompañada de una gran amiga mia. Yo ya le habia comentado lo que me parecia esta chica a mi amiga, y ella no dudo ni un instante en presentarnos, a pesar de la tardanza ya que esperó al mejor momento. Al principio parecía un poco tímida, pero a la hora de presentarnos y de darnos el par de besos correspondientes, que se suelen dar cuando conoces a un chica, el tiempo se paró a mi favor y disfrute de cada instante conforme me iba acercando a ella. Estaba tan solo a un par de centimetros de su cara, y podia olerla....su pelo tocaba suntuosamente mi mejilla, y en el momento de darle el beso, algo estalló en mi interior. Me negaba a creer que alguien pudiera provocar tal estado en dentro de mí pero no podía dejar de pensar en ella.

Nos sentamos sobre el césped todos, y ella casualmente se acomodó a mi lado. Yo estaba totalmente descolocado, no pensaba q pudiera actuar así, y mucho menos, que ella comenzara a hablar conmigo con total naturalidad pues según me dijeron, se me notaba bastante que estaba totalmente colado por ella...Comenzamos a hablar y no solo me quede asombrado al contemplarla de cerca, sino que ademas de ser como un ángel escapado del cielo, era interesantisima. Podia hablarle de cualquier cosa que siempre tenía algo que decirme, las conversaciones con ella nunca eran aburridas, y mucho menos monotonas, cada palabra q salia de sus delicados labios, acariciaban mi oido como las plumas caen al suelo.

Esa noche fue la mas larga de mi vida. LLege a casa bastante tarde pues las horas (q se me hicieron segundos, o quizás menos a su lado) que estube hablando con ella se me habían pasado volando...Solo deseaba q volviera a salir el sol para verla de nuevo.

Y llegó el día siguiente, donde no preste atención a nada. Solo deseaba verla, y la estube buscando por todos los lados, pero no apareció. Me senti totalmente frustrado, y al preguntar por ella, y oir que se encontraba enferma, no dude ni un instante en ir a verla.

Allí estaba ella, en la cama, tapada y con fiebre. Le lleve un detalle para que al menos se alegrara un poquito, y me recibió con los brazos abiertos. Estabamos solos en su habitación, y ella, a pesar de su estamo de ánimo totalmente por los suelos, no paraba de sonreirme...

Y pasaron los días sin que pudiera parar de pensar en ella, de estar con ella, de compartir cualquier cosas por ínfima que parezca con ella...cuando, al final un día mi amiga me comentó lo que ella opinaba de mi - Me ha comentado que eres un chaval majisimo, creo que le caes estupendamente - me dijo - y que haber si la invitas algún dia a tomar algo.
Tras eso, estube dos días sin poder dormir. No podia pensar que a alguien le pudiera haber caido así, que pensara eso de mí, y mucho menos que desease quedar conmigo. Por lo que el miedo se apodero de mi -¿como la podía invitar?. No sabía como hacerlo, y era algo inusualmente extraño pues siempre se me han dado bien las personas y entablar amistad con ellas.

Así que no lo pensé dos veces, y un día que la contemplaba por los pasillos y se me acercó a preguntarme como estaba, me lancé y la invité a tomar un helado. Ella aceptó al instante, provocando que la angustia en mi interior desapareciese por completo. Pasaron las horas y veía que el momento no llegaba, me prepare lo mejor que pude. Me puse mis mejores pantoles, una camiseta ajustada que dejase observar mi torso, y una sobrecamisa encima, que me diese cierto carácter desenfadado. Faltaban solo 5 min para la hora, y ya estaba esperandola. Bajó por la escalera de forma magistral, como solo en las películas se puede ver, cada paso que daba era una gota de felicidad que llegaba a mis sentimientos. Me saludó y dispusimos a tomarnos un helado, pues ya hacía algo de calor.

Ella tomó el control y al sentarnos en la terraza pidio sin tapujos un helado de dos bolas de chocolate con nata y un barquillo, luego me preguntó que quería y ante la necedad que poseia en mi rostro asentí con la cabeza como pude. Mientras tanto ella seguia hablando. Se interesó por mi, por mi estado de salud, pues no era uno de esos momentos felices en mi vida, de como estaba y demás...y yo me interesé por ella, pues hasta entonces no habiamos tenido oportunidad de estar a solas y de intimar entre nosotros.

LLegaron los helados, y ella tomo la cuchara cn la mano izquierda pues era zurda, y con delicadeza, pero con firmeza cogió un pedacito de la bola y se la metió en la boca, viendo como al cerrarla y retiraba la cuchara, los labios se restregaban por ambas caras de ésta, y derritiendo el resto del helado, por el calor que sus labios producían. Yo me quedé mirandola y ella con picardía, me preguntó si es que no comía, tras lo cual me espabile y comence a comer...
Fue una tarde realmente maravillosa, y tras no parar de hablar durante horas llegó el momento de la despedida pues no me atrevia a sentir nada mas por ella.

Al día siguiente ella se marchó y estubimos todo el verano sin vernos, tras lo cual la eché muchisimo de menos.

Volvimos al presente. Sentada, con una camiseta clara, de manga larga, y una chaqueta encima, con un escote realmente impresionante; unos pantoles ajustados que parecían su segunda piel. Fue el primer encuentro tras todo el verano, y algo en mi comenzó a despertar. Vino para irnos de fiesta, y me saludo muy animosamente.

Ya de fiesta, empezamos a tomar copas, y yo estaba confundido. Aquella noche estubo muy pegada a mi, bailamos casi toda la noche, y pensé que era la ocasión perfecta para besar esos labios pasionales que eran poseedores de algunas de mis mas ocultas fantasias...pero no pude.

Terminó la fiesta, y la acompañe a su casa...me comentó como le fue el verano, lo mucho que me hechaba de menos y se acordó de mi, y la alegría de verme de nuevo, pues dijo que me habia hecho todo un hombre.

A partir de ahí todo volvio a ser como antes, todo en ella era felicidad. No habia absolutamente nada que me disgustase de ella, un dia triste a su lado, con tan solo observar una sonrisa con su perfecta dentadura colocada con mimo un diente junto al otro como una estructura arquitectonica perfecta, era capaz de levantar un mundo a mi alrededor, y durante mucho tiempo me tubo confundido. Comencé a pasarlo mal pues queria que entre ella y yo hubiera algo más. Pero comprendí que la filosofía de la vida no es así.

Yo no la amaba a ella. Sabía que si ocurría algo entre nosotros, eso podría provocar una perdida irreparable entre nosotros, no queria perderla. Mis sentimientos por ella iban mas allá del amor. Amistad. Sentía por ella un profundo afecto, y daría cualquier cosa de lo q soy, por lo que ella me ha hecho sentirme.

Realmente mi corazón siempre ha estado con otra, y ella lo sabía. Por eso no intentó nada, dejo que yo me aclarase mis ideas puesto que confiaba en que tomaría la idea correcta y así me lo izo saber poco tiempo despues, fortaleciendo aun más nuestra relación, y provacando que mis sentimientos hacia ella no hicieran mas que aumentar más y más hasta extremos insospechados.

Hoy en dia puedo decir que es una gran persona con la q puedes contar para cualquier suceso que ocurra en mi vida, al igual que ella puede hacer lo mismo con la suya, y con la que me llevo tan estupendamente bien que no la cambiaria por nada ni por nadie. Ella me ha ayudado a formarme como persona. Ha hecho que mi madurez aumente poco a poco, y me ha ayudado a sentirme realizado como persona. "

Dedicado a S.S.

Tengo otros dos mas, pero son algo mas "simples" que este...luego lo intentare poner