Lo cachondo de todo esto, es que llegó el día 28 de febrero, osea, hace 3 días. La cuestión es que sabíamos que iba a traer un cachorro de 2 meses, que tampoco nos importaba demasiado, pero la gracia es que la primera noche la pasó con el novio (obviamente follando toda la puta noche)
La gracia de esto es que mi otro compañero está pared con pared con la nueva y no le dejaron pegar ojo. Ya de día la muchacha se fue a trabajar, para mi sorpresa se deja al maromo y al perro en la casa, acto seguido viene un amigo del muchacho (ya me estaba empezando a inflar las pelotas), pero con tal de que me asomé por las escaleras y ví que olía a porro, ya me estaba cagando en todo lo cagable.
Estuvieron como 2 horas fumando, riéndose a carcajada limpia, hasta que llegó la muchacha.
En ese momento subieron los tres a mi cuarto de baño (el cual ahora tendré que compartir con la muchacha esta, ya que la casa tiene 2 baños y mis otros dos compañeros usan el de abajo). Yo no sé como cogerlo me hicieron pero se metieron, abrieron el grifo de la ducha, lo pusieron todo hasta arriba de agua y encima se metieron con las zapatillas y lo dejaron todo manchado.
Para colmo, hoy que es mi día libre y tenía unas ganas impresionantes de rascarme los cojones, empiezan a subir y bajar escaleras, a regañarle al perro a grito pelado, a hablar fuerte entre ellos y... A FUMARSE UN PORRO, como no...
¿Qué se puede hacer en estos casos?