Lo siento mucho compañero. Ahora no habrán palabras que te sirvan de consuelo porque estarás bloqueado y destrozado.
Al poco que recobres las fuerzas para salir a la calle llama a amigos, sal, cómprate ropa nueva, mírate en el espejo y dile a tu reflejo: pero qué bueno estás!
Y folla, folla todas las veces que se te ponga delante la oportunidad.
Que la vida es muy corta y no te mereces estar hundido por una tía tan ligera de cascos.
Un abrazo.